Donald Trump y Joe Biden han declarado que la carrera republicana para nominar un candidato presidencial ha terminado, mientras que la ex embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, ha prometido luchar en un intento ambicioso por evitar una revancha electoral que 'nadie quiere'. Después de que ambos líderes obtuvieran victorias decisivas en New Hampshire, Trump y Biden centraron su atención en las elecciones generales del 5 de noviembre, mientras Haley lanzaba una campaña publicitaria contra Trump y Biden.
En el estado de New Hampshire, Donald Trump y Joe Biden han anunciado que la competencia republicana para elegir un candidato presidencial ha llegado a su fin.
Sin embargo, Nikki Haley, ex embajadora de Estados Unidos ante la ONU, ha prometido continuar en una ambiciosa lucha para evitar una revancha electoral que 'nadie desea'. Tras obtener victorias contundentes en New Hampshire, tanto Trump como Biden han fijado su atención en las elecciones generales del 5 de noviembre.
En contraste, Haley ha lanzado una oleada de publicidad que critica a Trump por ser 'demasiado caótico' y a Biden por ser 'demasiado viejo'.
El anuncio de Haley, difundido antes de un mitin en North Charleston, dice: 'Hay una mejor opción para una América mejor'. A pesar de los triunfos de Trump en Iowa y New Hampshire, todavía quedan muchas primarias hasta la Convención Nacional Republicana en julio, cuando los delegados del partido seleccionarán oficialmente a su candidato.
La determinación de Haley de continuar en la carrera se mantiene a pesar de la creciente presión para que se retire, y a medida que Trump intensifica el vitriolo en su contra.
Trump se ha referido a ella como 'cabeza de pájaro', ha criticado su 'ropa de lujo' y ha lanzado un sitio web que afirma que ella quiere recortar la seguridad social y los beneficios médicos para la mayoría de los estadounidenses.
También afirma que ella apoya una frontera abierta entre Estados Unidos y México.
Mientras tanto, Biden emitió un comunicado poco después del resultado en New Hampshire, afirmando que Trump prácticamente ha asegurado la nominación presidencial republicana para 2024. Pasó el día apelando a los votantes de clase trabajadora en estados clave que los demócratas temen perder ante Trump.
El presidente recibió un impulso el miércoles al obtener un codiciado respaldo de los United Auto Workers, cuyo sindicato fue respaldado por Biden durante una huelga el año pasado.
Se presentó en su línea de piquete.
Everyone sonríe mientras Joe Biden posa con Shawn Fain, presidente de los United Auto Workers, en la convención política del sindicato.
'Estoy orgulloso de apoyarlos y estoy orgulloso de que me apoyen.
Ese es el trato', dijo a los miembros del sindicato en un evento en Washington.