Un nuevo informe revela la utilización de métodos cuestionables por parte de las fuerzas israelíes en la ocupada Jenin, donde los soldados obligaron a un ciudadano a actuar como escudo humano durante una incursión militar.
En Jenin, Cisjordania, un hombre llamado Nasir Damaj compartió su angustiosa experiencia tras un encuentro con soldados israelíes.
Según su relato, los soldados lo sujetaron de ambos brazos y lo condujeron por las calles hasta llegar a los restos de una mezquita destruida.
Allí, Damaj se dio cuenta de que sería obligado a descender por un túnel que conducía a una cueva subterránea.
En ese momento, comprendió que estaba siendo utilizado como un escudo humano.
"Quisieron que inspeccionara lo que había abajo, para protegerlos", declaró Damaj.
A pesar de su oposición, los tres soldados y su comandante, armados con rifles de asalto, lo obligaron a investigar lo que los militares israelíes calificaron posteriormente como una 'instalación de combate subterránea'.
Damaj recordó que el comandante le advirtió: "Ten cuidado", mientras le entregaban un dron para que pudieran monitorear la cueva.
"No lo rompas.
Es caro". Este episodio, que ha sido corroborado por testigos, no ocurrió en la Franja de Gaza, donde las fuerzas israelíes han forzado de manera ilegal a palestinos a llevar a cabo misiones peligrosas para evitar poner en riesgo la vida de soldados israelíes.
En Cisjordania, donde Damaj se encontraba, los residentes han notado que las tácticas empleadas por las fuerzas israelíes se asemejan a las utilizadas en Gaza, incluyendo bombardeos aéreos y el uso de palestinos como escudos humanos.
La incursión israelí en Jenin, que duró 10 días, es parte de una ofensiva militar más amplia que comenzó a finales de agosto, indicando una intensificación de las acciones israelíes en la región.
Es importante recordar que Jenin ha sido un lugar de conflictos en el pasado.
En 2002, la ciudad fue escenario de una de las batallas más feroces durante la Segunda Intifada, que resultó en numerosas muertes tanto de palestinos como de soldados israelíes.
Desde entonces, la situación en la región ha sido volátil, con frecuentes enfrentamientos y un persistente clima de tensión que afecta a la vida cotidiana de sus habitantes.
La comunidad internacional ha expresado su preocupación por estos métodos, resaltando que el uso de civiles como escudos humanos es una violación de los derechos humanos.
Sin embargo, las tensiones siguen aumentando en medio de una lucha más extensa por el control y la soberanía en la región.
Mientras la población civil sufre las consecuencias, queda por ver cómo se desarrollará la situación en Jenin y si las autoridades tomarán medidas para poner fin a estas prácticas cuestionables que solo perpetúan el ciclo de violencia en el conflicto israelí-palestino.