Un ingeniero principal de OceanGate revela las tensiones internas y la falta de confianza en la preparación del sumergible Titan antes de su fatídimo viaje al Titanic.
Portland, Maine: En un reciente testimonio en una audiencia de investigación de la Guardia Costera de EE. UU., el ingeniero principal de OceanGate, Tony Nissen, hizo revelaciones preocupantes sobre la presión que sentía para preparar el sumergible Titan para su viaje al famoso naufragio del Titanic.
Esta audiencia, que se espera que dure dos semanas, se centra en las circunstancias que rodearon la tragedia ocurrida el 18 de junio de 2023, donde el Titan implosionó, resultando en la muerte de Stockton Rush, cofundador de OceanGate, y otros cuatro ocupantes.
Durante su declaración, Nissen compartió que se sintió presionado para que la aeronave estuviera lista para sumergirse, y recordó haberle dicho a Rush en varias ocasiones que no se sentía seguro para pilotar el sumergible.
"No me voy a meter en eso", fue la respuesta que Nissen ofreció en ocasiones pasadas.
Las tensiones entre Nissen y Rush eran notorias, ya que él describe a Rush como alguien difícil de trabajar, con una preocupación constante por los costos y los plazos de los proyectos, lo que generaba un ambiente de trabajo complicado.
Nissen también recordó que, en 2018, el Titan sufrió un rayo durante una prueba, lo que podría haber comprometido su estructura y seguridad.
Este incidente ya había lanzado sombras sobre la fiabilidad del sumergible, sin embargo, la presión por realizar la excursión al Titanic parecía eclipsar las preocupaciones sobre la seguridad.
Cuando se le preguntó directamente si había una presión palpable para poner al Titan en el agua, Nissen no dudó en afirmar: "Al 100%". Esta contundente declaración subraya una cultura corporativa donde las preocupaciones de seguridad fueron quizás relegadas a un segundo plano frente al objetivo de cumplir con los planes expeditivos de Rush.
El ingeniero también reveló que en 2019 se opuso a que el Titan realizara la expedición al Titanic porque sentía que el sumergible "no estaba funcionando como pensamos que debería". Como resultado de sus preocupaciones, fue despedido ese mismo año.
Pese a su despido, el Titan continuó con pruebas adicionales antes de sus posteriores inmersiones al famoso naufragio.
La tragedia del Titan ha suscitado un extenso debate mundial sobre el futuro de la exploración privada bajo el mar.
Desde su hundimiento, las críticas han crecido respecto a la regulación y la seguridad en las expediciones privadas a grandes profundidades.
Este caso no solo afecta a OceanGate, sino que presenta preguntas importantes sobre la sostenibilidad y la ética de la exploración submarina en general.
Las inmersiones en busca del Titanic comenzaron desde 1985, cuando Robert Ballard logró localizarlo, resaltando la importancia y el atractivo del naufragio.
Sin embargo, la tragedia reciente del Titan ha puesto de relieve los riesgos inherentes a estas expediciones y la necesidad de un enfoque más riguroso hacia la seguridad en futuros proyectos.
A medida que continúan las audiencias, el mundo observa atentamente, esperando respuestas que puedan prevenir que tragedias similares se repitan en el futuro.