En Rabat, Marruecos, se registró un raro y poderoso terremoto la noche del viernes, causando la muerte de cientos de personas y daños en edificios desde pueblos en las Montañas Atlas hasta la histórica ciudad de Marrakech.

Hombres, mujeres y niños permanecieron en las calles, temiendo réplicas.

Las autoridades marroquíes informaron temprano el sábado que al menos 296 personas habían fallecido en provincias cercanas al epicentro del terremoto.

Además, 153 personas heridas fueron enviadas a hospitales para recibir tratamiento.

El Ministerio del Interior escribió que la mayoría de los daños ocurrieron fuera de las ciudades.

Los marroquíes publicaron videos mostrando edificios reducidos a escombros, partes de los famosos muros rojos que rodean la antigua ciudad de Marrakech, un sitio del Patrimonio Mundial de la UNESCO, dañados.

Turistas y otras personas publicaron videos de personas gritando y evacuando restaurantes en la ciudad mientras sonaba música de club a todo volumen.

Los informes sobre los daños y las víctimas suelen tardar en llegar después de muchos terremotos, especialmente los que ocurren en mitad de la noche.

En lugar de regresar a edificios de concreto, hombres, mujeres y niños permanecieron en las calles preocupados por las réplicas y otras reverberaciones que podrían hacer que sus hogares se tambalearan.

El Servicio Geológico de Estados Unidos informó que el terremoto tuvo una magnitud preliminar de 6.8 cuando ocurrió a las 11:11 p.m.

hora local, con un temblor que duró varios segundos.

La Red Nacional de Monitoreo y Alerta Sísmica de Marruecos lo midió en 7 en la escala de Richter.

La agencia estadounidense informó que hubo una réplica de magnitud 4.9 19 minutos después.

Las variaciones en las mediciones preliminares son comunes, aunque cualquiera de los valores sería el más fuerte en años para Marruecos.

Aunque los terremotos son relativamente raros en el norte de África, en 1960 se registró un sismo de magnitud 5.8 cerca de Agadir que causó miles de muertes.