Un ataque con drones en la ciudad de Homs, Siria, dejó más de 100 muertos y numerosos heridos durante una ceremonia de graduación militar. El uso de drones armados en un país que ha enfrentado 12 años de guerra civil es inédito y este ataque se considera uno de los más sangrientos contra una instalación del ejército sirio.
Al menos 100 personas murieron y muchas resultaron heridas en la ciudad siria de Homs durante un ataque de drones que golpeó una ceremonia de graduación militar el jueves.
Fue uno de los ataques más sangrientos jamás perpetrados contra una instalación del ejército sirio, y sin precedentes en su uso de drones armados en un país que ha enfrentado 12 años de guerra civil.
Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, más de 100 personas murieron y 125 resultaron heridas.
Un oficial de la alianza que apoya al gobierno de Siria dijo que la cifra era de alrededor de 100.
El ministro de Salud, Hassan al-Ghobash, informó un número menor de muertos, diciendo a la televisión estatal que habían fallecido 80 personas, incluyendo seis mujeres y seis niños.
Sin embargo, afirmó que alrededor de 240 personas habían resultado heridas, incluyendo seis niños y personal militar.
Existen preocupaciones de que el número de víctimas mortales pueda aumentar, ya que muchos de los heridos se encuentran en estado grave.
En un comunicado anterior, el ejército dijo que drones cargados de explosivos atacaron la ceremonia, la cual estaba llena de jóvenes oficiales y sus familias.
Acusó a los insurgentes "respaldados por fuerzas internacionales conocidas" del ataque, sin mencionar ningún grupo en particular.
Hasta el momento, ningún grupo ha reclamado la responsabilidad del ataque.
El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, expresó una profunda preocupación por el ataque en Homs, así como por los informes de bombardeos de represalia en el noroeste de Siria, según su portavoz Stephane Dujarric.
El ejército no ha proporcionado cifras de víctimas, pero la televisión estatal informó que el gobierno anunció un estado de luto de tres días a partir del viernes.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, un monitor de guerra de la oposición con sede en Gran Bretaña, y la emisora de radio Sham FM, pro-gobierno, habían informado anteriormente sobre los ataques.