La muerte del CEO de UnitedHealthcare ha desatado un torrente de comentarios entre pacientes descontentos con el sistema de aseguradoras de salud en EE. UU.

La violenta muerte de Brian Thompson, un alto ejecutivo de UnitedHealthcare, ha generado una amplia variedad de reacciones en las redes sociales, donde muchos usuarios han expresado una mezcla de satisfacción y alivio ante su fallecimiento.

Thompson fue asesinado el miércoles en la acera de un hotel en Nueva York, un evento que ha puesto al descubierto las tensiones latentes en el sistema de salud estadounidense.

“Mis pensamientos y deducibles están con la familia”, decía uno de los comentarios en un video que mostraba el trágico suceso.

Otro usuario hacía referencia de manera sarcástica a los 'fuera de red', en alusión a las dificultades que enfrentan muchos pacientes a la hora de acceder a los servicios médicos adecuados.

Este tipo de reacciones son comprensibles, dado que muchos pacientes han experimentado demoras y rechazos en la cobertura de tratamientos, especialmente en situaciones críticas.

En TikTok, una enfermera de urgencias compartió su desconcierto, afirmando que ha visto a pacientes cuyos tratamientos fueron negados por las aseguradoras, lo que le resulta desgastante emocionalmente.

La muerte de Thompson ha resuelto en muchos, la falta de simpatía hacia un hombre cuya carrera estuvo profundamente ligada a las prácticas del sistema de salud estadounidense.

Brian Thompson, de 50 años y padre de dos hijos, se desempeñaba como CEO de la división de seguros de UnitedHealthcare, la cual reportó ingresos de aproximadamente 266 mil millones de euros el año pasado.

Esta división de la empresa provee cobertura a millones de estadounidenses a través de los planes de salud que ofrece a individuos, empleadores y programas gubernamentales como Medicare.

El impacto de su liderazgo se siente a través de una plantilla de aproximadamente 140,000 empleados.

El ejecutivo había recibido un paquete compensatorio que alcanzó los 9.6 millones de euros el año anterior, cifra que incluye un salario base de aproximadamente 920 mil euros, junto a bonificaciones y acciones de la compañía.

La situación se vuelve aún más irónica al considerar que Thompson fue abatido cuando se dirigía hacia el día anual de inversores de UnitedHealth Group, la compañía matriz de UnitedHealthcare.

Las investigaciones iniciales apuntan a que la escena del crimen contenía mensajes que, según las autoridades, estaban impresos en los casquillos de bala hallados; 'retrasar' y 'denegar', términos que son demasiado familiares para los ciudadanos americanos que lidian regularmente con compañías aseguradoras.

La indignación resultado de este caso podría desencadenar un debate más amplio sobre las prácticas de la industria de seguros de salud.

Stephan Meier, presidente de la división de gestión en la Escuela de Negocios de Columbia, advirtió que esta trágica noticia podría tener repercusiones significativas que trasciendan la imagen del ejecutivo fallecido, evidenciando las fallas del sistema que continúan aquejando a millones de personas en Estados Unidos.