Rusia lanzará su primera nave de aterrizaje lunar en 47 años en competencia con India por llegar al polo sur de la luna, una potencial fuente de agua para futuras misiones humanas. Un pueblo en el este de Rusia será evacuado por precaución.
En el contexto mundial y europeo, Rusia anunciará el lanzamiento de su primera nave espacial de aterrizaje lunar en casi medio siglo, desafiando a India en una carrera por llegar al polo sur de la luna, una región que se cree alberga grandes cantidades de agua, esencial para futuras misiones humanas.
Las autoridades rusas llevarán a cabo la evacuación de los residentes de un pueblo en el extremo oriente del país a las 7:30 a.m., con el objetivo de evitar cualquier riesgo de seguridad potencial.
Según un oficial, existe una "posibilidad de uno en un millón" de que los fragmentos desprendidos de la nave Luna-25 puedan caer en esa zona.
Alexei Maslov, vocero del lugar, informó a los medios rusos que los 26 habitantes de Shakhtinsky serán trasladados a un lugar especial desde donde podrán presenciar el lanzamiento y además disfrutar de un desayuno gratuito.
El regreso se espera que ocurra en un plazo no mayor a tres horas y media.
Los pescadores y cazadores de la región también han sido alertados sobre esta situación.
Por su parte, India ha enviado su propia nave de aterrizaje lunar, Chandrayaan-3, la cual tiene previsto llegar al polo sur de la luna el 23 de agosto.
Debido a su abrupto relieve, aterrizar en esta área resulta bastante desafiante.
Sin embargo, el polo sur es un destino muy valorado, ya que los científicos creen que se pueden encontrar grandes cantidades de hielo, sustancia que podría ser utilizada para la extracción de combustible, oxígeno y agua potable.
Según la agencia espacial rusa Roscosmos, la nave Luna-25 tardará cinco días en llegar a la luna.
Una vez allí, pasará entre cinco y siete días en órbita lunar antes de descender en uno de los tres posibles sitios de aterrizaje cercanos al polo sur.
Esto implica que Rusia podría llegar a la superficie lunar al mismo tiempo o incluso antes que su rival indio.
Roscosmos asegura que no habrá interferencias entre ambas misiones, ya que tienen áreas de aterrizaje diferentes.
"No existe peligro de que se obstaculicen o colisionen.
Hay suficiente espacio para todos en la luna", declararon.