Las autoridades rusas han anunciado la detención de un ciudadano uzbeko bajo sospecha de haber asesinado al teniente general Igor Kirillov, quien era el líder de las fuerzas de defensa radiológica, química y biológica de Rusia.

Esta detención se produjo tras un atentado con bomba que tuvo lugar en Moscú, siendo este el primer asesinato de un alto mando ruso dentro de las fronteras del país desde el inicio de la invasión de Ucrania en febrero de 2022.

De acuerdo con el Comité de Investigación de Moscú, el detenido habría sido reclutado por los servicios de seguridad de Ucrania con la promesa de recibir 100,000 dólares estadounidenses (aproximadamente 93,000 euros) y un pasaje seguro a una nación europea, si colaboraba en la colocación del explosivo que causó la muerte del general Kirillov.

Este último, junto a su asistente, fue abatido cuando un artefacto explosivo, plantado en una scooter, estalló cerca de la entrada de un edificio de apartamentos en la capital rusa.

La operación del atentado es descrita como minuciosa, ya que el uzbeko recibió el dispositivo explosivo por instrucciones de agentes ucranianos y lo colocó en la scooter, además de alquilar un automóvil para instalar una cámara de videovigilancia.

Esta cámara era utilizada por los organizadores del ataque para monitorear la entrada del edificio y detonar el artefacto a distancia desde la ciudad ucraniana de Dnipro.

La muerte de Kirillov se produjo justo un día después de que los servicios de seguridad de Ucrania, la SBU, lo acusaran de ordenar el uso masivo de armas químicas prohibidas contra las tropas ucranianas en la región este y sur del país, reportando más de 4,800 incidentes en un comunicado a través de su canal de Telegram.

Polémica en Rusia: Yevgeny Prigozhin desafía al Kremlin a través de Telegram

El polémico empresario ruso Yevgeny Prigozhin ha utilizado la aplicación de mensajería Telegram para declarar abiertamente una guerra contra el Ministerio de Defensa de Rusia. Sus mensajes críticos hacia el Kremlin han ganado notoriedad en los medios internacionales y han amenazado la legitimidad del presidente Vladimir Putin. Esta situación plantea un dilema para el Kremlin, ya que Telegram también ha sido utilizado para propagar la desinformación rusa a lo largo de los años.

Hasta el momento, Ucrania no ha emitido comentarios sobre la detención del uzbeko. Sin embargo, una fuente anónima familiarizada con la operación reveló que la SBU habría estado detrás de esta acción letal. En cambo, el Servicio Federal de Seguridad (FSB) de Rusia ha indicado que la detención fue parte de una operación conjunta que incluyó al Comité de Investigación y al Ministerio del Interior.

El general Igor Kirillov se convirtió en una figura conocida en la opinión pública rusa debido a sus frecuentes comparecencias en el Ministerio de Defensa.

En octubre, el Reino Unido ya había impuesto sanciones en su contra por la supuesta utilización de armas químicas, acusándolo de difundir desinformación para encubrir el comportamiento vergonzoso y peligroso de Rusia en este ámbito.

Este incidente marca un momento significativo en el contexto de las tensiones entre Rusia y Ucrania, destacando la escalada de violencia y las complicadas dinámicas geopolíticas entre ambos países desde el inicio del conflicto en 2022.

La metodología y el sigilo del ataque reflejan un alto grado de planificación y la creciente capacidad operativa de los servicios de inteligencia en la región, lo que plantea interrogantes sobre la seguridad de los altos mandos rusos.