El presidente surcoreano ha designado a un nuevo ministro de Defensa tras aceptar la renuncia de Kim Yong-hyun, relacionada con la reciente declaración de ley marcial.

El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, ha aceptado la renuncia de su ministro de Defensa, Kim Yong-hyun, quien dejó el cargo en una contexto de agitación política tras la controvertida declaración de ley marcial del mandatario.

En su lugar, Yoon ha nominado a Choi Byung-hyuk, actual embajador de Corea del Sur en Arabia Saudita, para asumir las riendas del ministerio de Defensa.

Kim Yong-hyun había ofrecido su renuncia el miércoles, tras ser una figura clave en la reciente polémica relacionada con la declaración de ley marcial hecha por Yoon el martes por la noche.

Según informes, un alto funcionario militar sugirió esta medida al presidente, pero la situación pronto se desbordó, provocando una tormenta política y diplomática.

En la madrugada del miércoles, en medio de la presión pública y las críticas, Yoon decidió retirar la declaración de ley marcial.

Chung Jin-suk, jefe de gabinete de Yoon, elogió a Choi Byung-hyuk, describiéndolo como una persona de principios, dedicada a su trabajo y comprometida con las regulaciones.

Esta nominación marca la primera acción oficial del presidente después del descontento generado por su intento de instaurar la ley marcial, que fue rápidamente cuestionado por la oposición.

El Parlamento surcoreano ha presentado una moción para destituir a Yoon, resaltando la seriedad de la situación política actual.

El Partido Democrático de la oposición ha calificado el intento de imponer la ley marcial como un acto traicionero y señala que podría convocar una votación sobre la acusación desde el mismo viernes, dejando en un limbo la estabilidad del gobierno actual.

A su vez, funcionarios estadounidenses expresaron su sorpresa por la decisión de Yoon, describiéndola como un error serio y mal ponderado.

Este episodio no solo ha destapado divisiones dentro de la política interna de Corea del Sur, sino que también ha tenido repercusiones a nivel internacional, afectando las relaciones diplomáticas del país.

La historia de Corea del Sur ha estado marcada por crisis políticas y cambios abruptos en el liderazgo.

Estos eventos han traído recuerdos de periodos más oscuros, como el régimen militar de la década de 1980, cuando se impusieron medidas de control sobre la sociedad y la política.

La sociedad surcoreana ha sido testigo de tensiones entre los deseos de estabilidad y democracia a lo largo de las décadas.

Ahora, mientras el país navega por este nuevo terreno político, todos los ojos están puestos en cómo el nuevo ministro de Defensa manejará no solo los asuntos militares nacionales, sino también la percepción internacional de Corea del Sur en un contexto cada vez más complicado.

Las próximas semanas serán cruciales para determinar el rumbo del gobierno de Yoon Suk Yeol y su capacidad para enfrentar la creciente oposición y las consecuencias de sus decisiones pasadas.