El respaldo a Kamala Harris en la Convención Demócrata de Chicago marca un cambio en la carrera presidencial de EE.UU.

En la Convención Demócrata llevada a cabo en Chicago, Kamala Harris, la candidata presidencial del partido, se encuentra respaldada por un excepcional cúmulo de poder político.

Esta vez cuenta con el apoyo no solo del presidente Joe Biden, sino también de personalidades como Bill Clinton y Barack Obama.

Además, la figura de Hillary Clinton, quien hizo historia al ser la primera mujer nominada como presidenta por un partido mayoritario, vuelve a resonar, recordando su victoria en votos populares en 2016 frente a Donald Trump, aunque esta no fue suficiente para lograr la presidencia.

Por otro lado, Donald Trump se presenta como el único referente de su partido, aislado ante la ausencia de otros líderes republicanos significativos.

George Bush y Mike Pence, su exvicepresidente, no se hacen presentes en su convención, mientras sus rivales políticos se convierten en meros seguidores.

Trump espera movilizar a su base de 72 millones de votantes que lo apoyaron en las elecciones anteriores, en un intento por frenar la creciente popularidad de Harris en las últimas semanas.

En estos momentos cruciales, las encuestas nacionales indican que Harris se encuentra liderando frente a Trump, no solo a nivel general, sino también en los estados clave que definirán la elección.

Aunque Trump cuenta con el respaldo de personalidades influyentes como Elon Musk, las plataformas digitales como X, TikTok y Zoom se convierten en aliados destacados de Harris.

Su campaña, que se concentra en un corto periodo de solo 100 días, le otorga una ventaja táctica para presentar una imagen renovada y llena de energía, contrastando con la presencia envejecida y a menudo negativa de Trump.

Para consolidar su liderazgo, Harris debe aprovechar su discurso durante la convención para delinear su visión del futuro estadounidense y cómo gobernará para todos los ciudadanos ante los desafíos actuales, destacando temas como el derecho al aborto, la violencia armada y la protección del voto.

Es esencial que su mensaje no solo resuene en su base de apoyo, sino que logre atraer a los votantes que aún apoyan a Trump.

De hecho, la estrategia incluye publicidad en medios como Fox News, con el objetivo de llegar a un público más amplio.

En el próximo debate de septiembre, Harris deberá prepararse para contrarrestar las tácticas de Trump, cuando este intente socavar su credibilidad.

La candidata debe demostrar, utilizando todos sus recursos y habilidades de argumentación, que Trump no es apto para regresar a la presidencia.

Este será un punto crucial para asegurar su victoria en las elecciones de noviembre.

A pesar de la importancia del liderazgo económico bajo la administración de Biden, donde se ha logrado un desempeño macroeconómico notable, la situación real de los ciudadanos refleja un aumento de precios entre el 20% y el 40% desde que Harris y Biden asumieron el poder.

Las tasas de interés también han alcanzado niveles históricamente altos en más de tres décadas.

Por lo tanto, Harris tiene la necesidad urgente de que la Reserva Federal reduzca las tasas de interés en la próxima reunión.

Un cambio así podría infundir optimismo entre los votantes, al señalar que posiblemente se alivien las presiones sobre el costo de la vida bajo un hipotético presidencia de Harris.