Una tormenta lenta ha dejado caer 300 milímetros de lluvia en partes de la Isla Sur de Nueva Zelanda, desatando inundaciones, deslizamientos de tierra y un estado de emergencia para Queenstown, que ya estaba sufriendo un brote de criptosporidium.

Una tormenta lenta ha afectado la Isla Sur de Nueva Zelanda, provocando inundaciones y deslizamientos de tierra en varios lugares.

La ciudad de Queenstown, uno de los principales destinos turísticos del país, ha sido especialmente afectada por las fuertes lluvias.

Según el alcalde de Queenstown Lakes, Glyn Lewers, se han producido varios eventos de inundaciones y desprendimientos de escombros debido a las intensas precipitaciones.

Como resultado, se ha declarado un estado de emergencia en Queenstown.

Durante las últimas 24 horas, se registraron 87 milímetros de lluvia en Queenstown, la mayor cantidad en un solo día en los últimos 24 años.

Las calles de la ciudad se han visto afectadas por el barro, troncos y desechos procedentes de las colinas cercanas.

Las autoridades locales y de gestión de emergencias han estado evaluando la situación y han recomendado a los residentes y turistas que eviten el centro de la ciudad.

Además, se ha establecido un centro de evacuación en la Iglesia de San Pedro, donde más de 100 personas han sido evacuadas hasta el momento.

El río Mataura en el norte de Southland también se desbordó, añadiendo más complicaciones a la situación.

Las redes sociales se han llenado de imágenes de las calles inundadas y las difíciles condiciones.

El alcalde Lewers ha hecho un llamamiento a la precaución para aquellos que necesiten viajar, instándoles a tener extremo cuidado debido a los peligros asociados con las inundaciones y los deslizamientos de tierra.

Esta tormenta es un recordatorio de la importancia de estar preparados para condiciones climáticas extremas.

Las autoridades locales se encuentran trabajando en la evaluación de los daños y en la gestión de la situación en curso.