La ex presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, se encuentra en proceso de recuperación tras una operación de cadera realizada en una base militar de Estados Unidos en Alemania.

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Nancy Pelosi, la ex presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, ha sido sometida a una cirugía de reemplazo de cadera en una base militar estadounidense ubicada en Alemania, según confirmaron fuentes de su oficina.

La intervención quirúrgica se llevó a cabo en la Base Militar Landstuhl, y fue realizada tras un accidente que llevó a Pelosi a ser hospitalizada en Luxemburgo.

Pelosi, que tiene 84 años, sufrió una caída durante una visita conmemorativa al Gran Ducado de Luxemburgo, donde se marcaba el 80 aniversario de la Batalla de las Ardenas, una de las confrontaciones más significativas de la Segunda Guerra Mundial.

Aunque no se dieron muchos detalles sobre la gravedad de la lesión, se informó que la ex presidenta tuvo una ‘caída dura’ mientras descendía por unas escaleras de mármol en el Palacio Gran Ducal, residencia oficial del Gran Duque de Luxemburgo.

A primera hora del sábado, a través de un comunicado, Ian Krager, portavoz de Pelosi, aseguró que la cirugía fue exitosa y que la política se encuentra en proceso de recuperación.

"La presidenta emérita Pelosi agradece al personal militar estadounidense en el Centro Médico Regional de Landstuhl y al personal médico del Hospital Kirchberg en Luxemburgo por su excelente atención y amabilidad", indicó Krager.

Desde su reelección en noviembre para su vigésima legislatura en la Cámara, Pelosi ha sido una figura destacada en la política estadounidense. Históricamente, es reconocida no solo por ser la primera mujer en ocupar el cargo de presidenta de la Cámara, que desempeñó de 2007 a 2011, sino también por haber recuperado dicho puesto en 2019 antes de renunciar a su liderazgo demócrata en noviembre de 2022.


No es la primera vez que Pelosi enfrenta problemas de salud. Su caída se suma a una semana desafiante para los miembros octogenarios del Congreso, ya que el senador líder de la minoría, Mitch McConnell, también sufrió un accidente durante un almuerzo cerrado, resultando con una muñeca esguinzada y un leve corte en la cara.

McConnell, que cuenta con 82 años, se vio obligado a ausentarse de varias votaciones por rigidez en la pierna.

La salud de los legisladores mayores ha generado debate en Estados Unidos, donde muchos ciudadanos cuestionan la capacidad de las personas mayores para ocupar cargos de alta responsabilidad en un contexto político donde las decisiones tienen un impacto directo en el bienestar general del país.

Esta situación puede generar un cambio en la percepción pública respecto a la elegibilidad de personas de edad avanzada para posiciones de liderazgo.

En definitiva, la cirugía de Nancy Pelosi subraya la vulnerabilidad que enfrentan muchos de los líderes veteranos en el Congreso, y el impacto que sus condiciones de salud pueden tener en el futuro político del país.