El senador republicano Mitch McConnell anunció su renuncia como líder del Senado después de casi 17 años, dejando un vacío de poder en el partido que ha liderado durante tanto tiempo.

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En Estados Unidos, el líder republicano del Senado, Mitch McConnell, anunció que dejará su cargo, dejando un vacío de poder en el partido que ha dirigido durante casi 17 años.

El senador de 82 años de Kentucky dejará un personaje central en las negociaciones con los demócratas y la Casa Blanca sobre acuerdos de gastos para mantener financiado al gobierno federal y evitar un cierre.

Su partida marcará un paso atrás de un contraparte ordenado al enfoque tumultuoso de Donald Trump, el favorito para la nominación presidencial republicana.

También marcará el final de la carrera de un senador criticado por los demócratas por haber utilizado tácticas sin precedentes para consolidar una mayoría conservadora de 6-3 en la Corte Suprema, que ha actuado agresivamente para poner fin al derecho nacional al aborto y expandir los derechos de las armas.

McConnell se ha enfrentado al doblemente enjuiciado Trump por afirmar falsamente que el fraude generalizado le costó las elecciones de 2020, tema del discurso del entonces presidente el 6 de enero de 2021, poco antes de que sus seguidores asaltaran el Capitolio de Estados Unidos.


La salida de McConnell dejará un vacío de poder en el liderazgo del Senado, ya que los republicanos tendrán que elegir a un nuevo líder de partido.

Esto creará más incertidumbre para el partido, ya que la presión conservadora para mantener una postura firme en las negociaciones presupuestarias y en la elección de liderazgo podría pesar más.

La capacidad de McConnell para seguir desempeñando las funciones de su trabajo ha sido cuestionada, especialmente después de que se haya congelado dos veces el verano pasado mientras hacía comentarios en público.

A pesar de que un médico del Congreso lo autorizó a seguir trabajando el 31 de agosto, las preocupaciones sobre su salud han persistido.

Padre Tiempo sigue invicto y McConnell reconoce que ya no es el joven sentado en la parte trasera esperando que sus colegas recuerden su nombre.

Ha llegado el momento de una nueva generación de liderazgo.