Beirut ha sido escenario de una serie de detonaciones provocadas por radios de mano utilizadas por el grupo militante Hezbollah, lo que ha intensificado las fricciones con Israel.

Un día después de que estallaran explosiones provenientes de dispositivos de la misma organización, el Ministerio de Salud de Líbano reportó que al menos 20 personas han muerto y 450 han resultado heridas en un segundo día de incidentes explosivos.

Entre las víctimas de las explosiones se encuentran dos niños, mientras que el número total de heridos desde el inicio de los estallidos asciende a casi 3000, con muchos de ellos siendo militantes de Hezbollah y el embajador de Irán en Beirut.

No ha habido comentarios oficiales por parte de Israel respecto a los incidentes, aunque fuentes de seguridad sostienen que el servicio de inteligencia israelí, Mossad, podría estar detrás de estas explosiones.

Un funcionario de Hezbollah describió este episodio como la mayor brecha de seguridad en la historia del grupo.

Las operaciones explosivas, que han generado confusión dentro de Hezbollah, se producen en un contexto de conflicto continuo, ya que Israel lleva casi un año en guerra en Gaza, lo que ha suscitado temores sobre una posible escalada en la frontera libanesa y el riesgo de un conflicto regional más amplio.

El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, comentó que se está abriendo una nueva fase en la guerra y que se requiere valentía, determinación y perseverancia para enfrentar la situación actual.

Nueve civiles muertos en ataques israelíes en el sur del Líbano

Nueve civiles, incluidos cuatro niños, han perdido la vida en una serie de ataques israelíes en pueblos del sur del Líbano, según informaron el director de un hospital y tres fuentes de seguridad libanesas. Israel alega que respondió a los cohetes de Hezbolá que previamente habían matado a un soldado. Los ataques israelíes en el pueblo de al-Sawana dejaron una mujer y sus dos hijos muertos. Además, un edificio en Nabatieh fue bombardeado, cobrándose la vida de dos niños, tres mujeres y un hombre, según informó el director del hospital de la localidad, Hassan Wazni, y tres fuentes de seguridad. Otras siete personas llegaron al hospital para recibir tratamiento tras el ataque. El texto completo contiene más de 400 palabras.

Según sus declaraciones, el foco del conflicto se está moviendo hacia el norte, en la frontera entre Líbano e Israel, lo que ha llevado a un aumento en el despliegue de tropas y recursos en el área.

Esta escalada de tensiones ha provocado una reacción internacional, con el ministro de Relaciones Exteriores de Jordania, Ayman Safadi, acusando a Israel de llevar a Oriente Medio al borde de una guerra regional al orquestar una peligrosa escalada en múltiples frentes.

Históricamente, Líbano ha sido un escenario de conflictos complejos que involucran a varios actores regionales, y la influencia de Irán a través de Hezbollah ha complicado aún más la situación.

Desde la guerra civil libanesa en los años 70 y 80 hasta la invasión israelí en 1982, la región ha estado marcada por ciclos de violencia y tensión.

La comunidad internacional observa con preocupación, ya que el peligro de un conflicto a gran escala podría tener repercusiones en toda la región, afectando no solo a Líbano e Israel, sino también a países vecinos como Siria y Jordania, que podrían verse arrastrados a la violencia en caso de un enfrentamiento más amplio.

A medida que la situación evoluciona, permanecerá en el centro del debate político y militar, no solo en el ámbito local, sino también en el del Medio Oriente, donde las alianzas y enemistades son constantemente reajustadas.