El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha condenado la brutalidad de Hamas contra niños durante su ofensiva en Israel y ha prometido que Estados Unidos no permanecerá en silencio sobre la magnitud de las atrocidades. En una reunión con líderes judíos en la Casa Blanca, Biden también se ha manifestado en contra del antisemitismo en Estados Unidos, en un momento en que las tensiones entre los partidarios de Israel y Palestina aumentan en las universidades estadounidenses, las calles de las ciudades y los salones del poder en Washington.

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El presidente Biden ha vuelto a condenar la brutalidad de Hamas durante el conflicto en Israel, donde las hostilidades entre Israel y Hamas han entrado en su quinto día.

Durante una reunión con líderes judíos en la Casa Blanca, Biden ha expresado su rechazo al antisemitismo en Estados Unidos, mientras las tensiones entre los partidarios de Israel y Palestina escalan en las universidades estadounidenses, las calles de las ciudades y los salones del poder en Washington.

El presidente ha instado a todos a luchar contra el antisemitismo y a rechazar cualquier intento de negar o distorsionar los hechos, dejando claro que no hay lugar para el odio en Estados Unidos: "No contra judíos, no contra musulmanes, no contra nadie", afirmó.

Estas declaraciones del presidente se producen en medio de la atención mundial por los horrores del fin de semana, con algunos informes que sugieren que el ejército israelí ha descubierto decenas de cadáveres mutilados en una de las comunidades atacadas por Hamas el sábado por la mañana.


Biden ha dicho: "He estado en esto durante mucho tiempo y nunca imaginé que vería o tendría fotografías confirmadas de terroristas degollando a niños".

Un portavoz de la Casa Blanca aclaró más tarde que Biden no había visto las fotos y había basado sus comentarios en informes de los medios israelíes y en declaraciones del portavoz del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

Aunque circulan informes espeluznantes sobre la decapitación de niños por parte de Hamas en el kibutz Kfar Aza, Hamas ha calificado las acusaciones de "fabricadas y sin fundamento".