En el área de Deir al-Balah, en la Franja de Gaza, un ataque israelí a una escuela que albergaba a palestinos desplazados en el centro de Gaza ha dejado al menos 33 personas muertas, incluyendo 12 mujeres y niños, según informaron autoridades locales de salud.

El ejército israelí afirmó que milicianos de Hamas estaban operando desde dentro de la escuela.

Este trágico suceso es la última instancia de víctimas masivas entre los palestinos que intentan encontrar refugio mientras Israel expande su ofensiva.

Un día antes, el ejército anunció un nuevo asalto terrestre y aéreo en el centro de Gaza, persiguiendo a los militantes de Hamas que, según afirma, se han reagrupado allí. Las tropas han vuelto repetidamente a partes de la Franja de Gaza que habían invadido anteriormente, subrayando la resistencia del grupo militante a pesar de los casi ocho meses de ofensiva israelí.

Testigos y funcionarios hospitalarios informaron que el ataque de madrugada del jueves alcanzó la Escuela al-Sardi, dirigida por la agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos conocida por el acrónimo UNRWA. Según dijeron, la escuela estaba llena de palestinos que habían huido de las operaciones y bombardeos israelíes en el norte de Gaza.

Inicialmente, el hospital informó que nueve mujeres y 14 niños se encontraban entre los fallecidos en el ataque a la escuela.

Más tarde, la morgue del hospital modificó esos registros para mostrar que los fallecidos incluían a tres mujeres, nueve niños y 21 hombres.

No estaba claro de inmediato qué causó la discrepancia.

Un reportero de Associated Press contó los cuerpos, pero no pudo mirar bajo los sudarios.

Otros ataques en el centro de Gaza mataron a otras 15 personas, casi todos hombres.