La Casa Blanca ha confirmado que una nueva legislación reducirá significativamente el acceso a servicios médicos para más de 1,4 millones de inmigrantes en situación irregular en EE.UU., mientras fortalece la seguridad en la frontera y realiza cambios fiscales importantes.

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Según declaraciones oficiales, esta legislación eliminará la cobertura sanitaria del programa Medicaid para más de 1,4 millones de inmigrantes que se encuentran en situación irregular, incluyendo a aquellas personas que han cometido delitos graves.

Este anuncio se produce en un contexto donde el país ha enfrentado debates intensos sobre la #inmigración y el uso de recursos públicos. Desde su aprobación, la ley ha sido defendida por el presidente Donald Trump, quien la ha descrito como una medida que protege los recursos destinados a los ciudadanos estadounidenses, asegurando que las ayudas sociales no sean utilizadas por quienes no tienen derecho a ellas.

El gobierno estadounidense argumenta que esta ley no solo busca reducir el uso indebido de recursos públicos, sino también fortalecer la seguridad fronteriza.

Entre las medidas contempladas, se incluye la contratación de 10.000 nuevos agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y 3.000 nuevos efectivos de la Patrulla Fronteriza para deportar a al menos un millón de inmigrantes ilegales cada año. Además, se ha prometido un bono de 10.000 dólares anuales durante los próximos cuatro años para estos agentes, en reconocimiento a su labor.

Estas medidas se inscriben en una serie de políticas migratorias que han sido objeto de polémica en Estados Unidos durante décadas

Desde un punto de vista histórico, estas medidas se inscriben en una serie de políticas migratorias que han sido objeto de polémica en Estados Unidos durante décadas.

La #política migratoria del país ha estado marcada por altibajos, desde leyes que facilitaron la entrada de inmigrantes en los años 80 y 90, hasta medidas restrictivas como las promulgadas en la administración Trump en 2017, que buscaban reducir la inmigración ilegal y reforzar la seguridad en las fronteras.

Por otra parte, la Cámara de Representantes ha dado su visto bueno a la ley, que también contempla una serie de incentivos fiscales y un aumento en el gasto militar y en la protección de las fronteras.

Entre los cambios destacados, se encuentra la eliminación de impuestos sobre las propinas y las horas extras, una promesa hecha por Trump durante su campaña presidencial.

Además, la legislación prevé elevar el techo de la deuda nacional en 4 billones de dólares, lo que equivale a aproximadamente 3,6 billones de euros.

Esta ley, en definitiva, refleja la intención del gobierno estadounidense de priorizar la seguridad y los recursos destinados a sus ciudadanos, en medio de un debate nacional que continúa siendo muy polarizado.