En Oriente Medio, Doha, Qatar: Durante casi dos décadas, Hamas ha estado a cargo de gobernar la Franja de Gaza, supervisando sus pasos fronterizos, escuelas y hospitales.

Pero tras nueve meses de una guerra ruinosa con Israel, el grupo militante ahora está expresando su disposición a ceder el gobierno civil en Gaza, aunque sin desmantelar su ala militar.

Husam Badran, un alto funcionario político y portavoz de Hamas, en su oficina en Doha.

El gesto de Hamas, aunque probablemente sea inaceptable para Israel, pretende señalar a la comunidad internacional la aparente disposición de Hamas a hacer algunas concesiones para permitir la reconstrucción de Gaza.

También llega en medio de las negociaciones de alto el fuego, en las que Hamas ha mostrado cierta flexibilidad en el lenguaje de un posible acuerdo.

"En primer lugar, queremos que el pueblo palestino en Gaza se recupere de esta guerra", dijo Husam Badran, un alto funcionario de Hamas, en una entrevista en un edificio no identificado en la capital qatarí, Doha.

Hamas, según Badran, apoyaría la formación de un gobierno para Gaza y Cisjordania liderado por figuras independientes que puedan trabajar con funcionarios extranjeros en la reconstrucción del enclave costero.

Aunque tal perspectiva enfrenta grandes obstáculos, los comentarios de Badran constituyeron una de las visiones más detalladas presentadas por un funcionario de Hamas para el futuro de Gaza.

Un funcionario estadounidense confirmó que Hamas había transmitido su disposición a ceder el control civil de Gaza.

Bajo un acuerdo marco de alto el fuego que se está discutiendo en Qatar y Egipto, Hamas, considerado una organización terrorista por Estados Unidos y otros países, permitiría que una fuerza de seguridad leal a la Autoridad Palestina con sede en Cisjordania ejerza control sobre Gaza, según el funcionario estadounidense, que habló bajo condición de anonimato para discutir diplomacia sensible.

Para Israel, cualquier papel de Hamas en la Gaza posterior a la guerra, incluso indirecto, probablemente será rechazado de inmediato.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha prometido repetidamente desmantelar las capacidades militares y de gobierno de Hamas.

También se ha referido al llamado día después de la guerra en Gaza, un término utilizado para describir los planes para el territorio, como el "día después de Hamas".