El grupo de hackers Anonymous Sudan, vinculado a Rusia, se ha responsabilizado de los ataques que han provocado interrupciones en el servicio de ChatGPT de OpenAI esta semana. El grupo afirma que ha dirigido sus ataques a la empresa debido a su apoyo a Israel. Aunque Anonymous Sudan pretende ser un grupo activista que lucha en nombre de los musulmanes oprimidos en todo el mundo, los investigadores de ciberseguridad creen que está conectado con Rusia y que sus objetivos coinciden constantemente con las prioridades geopolíticas del Kremlin.
En un mensaje publicado el miércoles en la aplicación de mensajería Telegram, el grupo Anonymous Sudan afirmó haber lanzado una serie de ataques contra OpenAI, la startup respaldada por Microsoft, debido a su exploración de oportunidades de inversión en Israel.
OpenAI informó de 'interrupciones periódicas' en su chatbot estrella el miércoles, que atribuyó a un 'patrón de tráfico anormal' que sugería un ataque de denegación de servicio distribuido, capaz de inundar un servidor con tráfico para dejarlo fuera de línea.
Anonymous Sudan se presenta como una banda de 'hacktivistas' que lleva a cabo ataques desde África en nombre de los musulmanes oprimidos en todo el mundo.
Sin embargo, los principales investigadores de ciberseguridad creen que está vinculado a Rusia y que sus objetivos coinciden constantemente con las prioridades geopolíticas del Kremlin.
OpenAI no identificó la fuente del presunto ataque y Bloomberg News no pudo verificar de forma independiente las afirmaciones de Anonymous Sudan.
Un portavoz de OpenAI no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
La compañía informó de que ha solucionado el problema que causaba tasas de error inusualmente altas en su software y plataforma de inteligencia artificial.
Anonymous Sudan ha llevado a cabo una campaña de ataques DDoS de alto perfil este año.
En junio, dejó fuera de servicio algunos servicios de Microsoft, como Outlook, Teams y OneDrive.
También ha atacado a la OTAN, al Banco Europeo de Inversiones, así como a organizaciones de medios de comunicación, aerolíneas y compañías de energía.
Incluso antes del estallido de la guerra entre Israel y Hamás en octubre, Anonymous Sudan afirmaba estar detrás de una serie de ataques dirigidos a organizaciones israelíes.
Se le ha atribuido ataques DDoS contra organizaciones de noticias israelíes, agencias gubernamentales y militares, universidades, bancos, proveedores de telecomunicaciones, empresas tecnológicas y sistemas de advertencia de cohetes que emiten alertas.