La noticia informa sobre el accidente aéreo en Rusia en el que se cree murieron los líderes del Grupo Wagner, el infame grupo de mercenarios. Sin embargo, el destino del grupo y sus operaciones a nivel mundial sigue siendo incierto.
Los líderes del grupo de mercenarios más notorio del mundo se cree que han muerto, luego de un sospechoso accidente aéreo en Rusia, exactamente dos meses después de llevar a cabo un fallido golpe de estado contra el ejército del país.
Sin embargo, el destino del Grupo Wagner en sí mismo, y de su extensa red de empresas ficticias y mercenarios, es aún más incierto.
Después del impactante y breve intento de golpe de estado de Yevgeny Prigozhin, líder de Wagner, contra el régimen del presidente ruso Vladimir Putin en junio, los observadores del Kremlin atribuyeron su relativa supervivencia al poder del grupo de mercenarios.
Wagner no solo respaldó la sangrienta y costosa guerra de Putin en Ucrania, sino que también restableció la antigua presencia de Rusia en África, incluyendo la adquisición de lucrativas minas de diamantes y oro.
A pesar de que Putin, conocido por su falta de misericordia con los traidores, denunció el avance de Wagner hacia Moscú como una "puñalada por la espalda", Bielorrusia negoció un acuerdo notablemente generoso para Prigozhin.
Sus combatientes de Wagner debían cesar sus operaciones y aceptar el exilio en el país vecino y aliado del Kremlin.
A cambio, el oligarca permanecería en libertad, presumiblemente al mando de las operaciones de Wagner.
En las semanas siguientes, Prigozhin fue visto regularmente en Rusia, relacionándose con dignatarios, incluso mientras otros militares sospechosos de conspirar en el golpe de estado eran arrestados.
Muchos analistas creían que su control sobre la maquinaria de Wagner podría mantenerlo con vida.
Días antes de su supuesta muerte, Prigozhin apareció en un video de reclutamiento en un desierto, presumiblemente en África, para promocionar las operaciones de Wagner en el continente.
Ahora parece que Putin puede haber estado esperando el momento adecuado para controlar a Wagner bajo su mando.