Se implementarán pausas de tres días para permitir la vacunación de cientos de miles de niños tras un caso confirmado de polio en Gaza.

En un giro inesperado en medio del conflicto en Gaza, las fuerzas armadas de Israel y el grupo militante palestino Hamas han acordado un alto el fuego de tres días para facilitar la vacunación contra la poliomielitis, una medida urgente después de que se confirmara un caso de esta enfermedad en un bebé de la región.

Esta decisión, respaldada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), busca proteger la salud de cientos de miles de niños vulnerables en el área.

La OMS ha especificado que el acuerdo permitirá la vacunación de aproximadamente 640,000 niños, que recibirán dos dosis del vacunas oral contra la polio.

La primera ronda de vacunación comenzará el próximo domingo en el centro de Gaza, en un período conocido como "pausa humanitaria" que estará en vigor de 6 a.m.

a 3 p.m.

durante tres días.

Esta pausa tiene la posibilidad de extenderse un día más si se considera necesario.

El pequeño Abdel-Rahman Abu el-Jedian, de 11 meses, es uno de los niños que necesita urgentemente esta vacuna.

Su madre lo sostiene en un campamento improvisado en Deir al-Balah, en la franja de Gaza, un recordatorio dramático de la fragilidad de la salud infantil en esta región devastada por el conflicto.

La situación de Abdel-Rahman destaca la importancia de esta campaña de vacunación, la primera en 25 años en Gaza.

Rik Peeperkorn, representante de la OMS en los territorios palestinos, mencionó que aunque esta solución no es la ideal, sí es un avance en el camino correcto.

"Es un paso manejable hacia adelante", comentó en una conferencia de prensa virtual desde Gaza.

La iniciativa está diseñada para garantizar que las familias tengan la oportunidad de vacunar a sus hijos y regresar a sus hogares antes de que finalicen las pausas.

La campaña de vacunación se ha coordinado con las autoridades israelíes y se extenderá, tras los primeros días en el centro de Gaza, al sur y luego al norte de la región, asegurando que el proceso llegue a todos los rincones de Gaza.

Peeperkorn también afirmó que la clave para detener la propagación de la poliomielitis es lograr vacunar al menos al 90% de los niños en Gaza.

Más de 2,100 trabajadores de la salud, provenientes de agencias de la ONU y del Ministerio de Salud de Gaza, estarán involucrados en esta campaña, trabajando en cientos de sitios y con equipos móviles para acceder a la mayor cantidad posible de niños.

Las esperanzas de la comunidad internacional están puestas en que esta iniciativa no solo salvará vidas, sino que también evitará un brote mayor de polio en la región, que ha sido objeto de múltiples conflictos y crisis humanitarias a lo largo de su historia.

Este acuerdo no solo representa un esfuerzo de salud pública, sino que también refleja la urgencia de buscar soluciones colaborativas en medio de tensiones duraderas.

Queda por ver si este tipo de compromisos pueden ser sostenidos en el tiempo y representar un cambio positivo en la vida de los habitantes de Gaza.