La escalada de violencia en la Franja de Gaza continúa empeorando, y se espera que Israel lance una invasión terrestre contra los militantes de Hamás.

El conflicto está aumentando rápidamente el número de muertos en Gaza, y Estados Unidos teme que los enfrentamientos puedan desencadenar un conflicto más amplio en la región.

Los 2.3 millones de habitantes de Gaza están quedándose sin alimentos, agua y medicinas desde que Israel cerró el territorio tras el ataque de Hamás a las ciudades israelíes el 7 de octubre.

Las caravanas de ayuda permitidas hasta ahora han llevado solo una fracción de lo necesario, y la ONU ha dicho que la distribución tendrá que detenerse si no hay combustible para los camiones.

Veinte camiones no pudieron transportar ayuda a los civiles palestinos en la asediada Franja de Gaza el martes, según informó Naciones Unidas, mientras que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, calificó los esfuerzos humanitarios para entregar ayuda a través de un cruce desde Egipto como 'demasiado lentos'.

'Esperamos que los materiales puedan entrar en Gaza mañana', dijo la portavoz de ayuda de la ONU, Eri Kaneko.

No mencionó por qué los camiones no habían podido cruzar a Gaza desde Egipto el martes.

La guerra, que está en su decimoctavo día el martes, es la más mortífera de las cinco guerras en Gaza para ambos lados.

El Ministerio de Salud dirigido por Hamás dijo que al menos 5791 palestinos han muerto y 16,297 han resultado heridos.

En Cisjordania ocupada, 96 palestinos han muerto y 1650 han resultado heridos en la violencia y los ataques israelíes desde el 7 de octubre.

Más de 1400 personas en Israel han muerto, en su mayoría civiles que perdieron la vida en el primer ataque de Hamás.

Además, se cree que 222 personas, incluidos extranjeros, fueron capturadas por Hamás durante la incursión y llevadas a Gaza, según informó el ejército israelí. Cuatro de ellas han sido liberadas.

Un grupo de varias docenas de personas realizó una vigilia frente al Parlamento el martes para recordar a los miles de niños palestinos muertos en los bombardeos israelíes.

El grupo, organizado por la organización Medical Aid for Palestinians, había escrito los nombres de los niños fallecidos en sus palmas y guardaron un minuto de silencio.