Los líderes mundiales reunidos en la cumbre del G20 en Nueva Delhi han condenado de manera enérgica la guerra en Ucrania, emitiendo una declaración que supone una dura reprimenda a las acciones de Vladimir Putin. A pesar de algunas modificaciones en el texto, la comunidad internacional ha acordado un lenguaje contundente en contra de la guerra.
El primer ministro Anthony Albanese ha elogiado la cumbre del G20 por su dura condena internacional a la guerra de Vladimir Putin en Ucrania.
En la celebración final del primer día de la cumbre en Nueva Delhi, Albanese declaró que los líderes mundiales han emitido una declaración "extraordinariamente fuerte" sobre la guerra, describiéndola como "el lenguaje más contundente acordado hasta ahora por la comunidad internacional".
Albanese afirmó que "Rusia tiene que haber recibido el mensaje de que esto está teniendo un impacto devastador y que el mundo quiere que esta guerra termine debido al impacto en el pueblo de Ucrania, pero también debido al impacto que está teniendo en la inflación y las economías globales". Sin embargo, Putin volvió a ausentarse de la cumbre por segundo año consecutivo, al igual que el presidente chino Xi Jinping, quien también decidió no asistir al evento desde que asumió su cargo.
El primer ministro también expresó su deseo de finalizar un amplio acuerdo de libre comercio con la Unión Europea antes de que las próximas elecciones europeas dificulten alcanzar un acuerdo.
Según Albanese, "orador tras orador" en la cumbre han "reiterado la necesidad de que Rusia detenga esta guerra, lo cual [Putin] puede hacer hoy mismo".
Sin embargo, el lenguaje utilizado en la declaración del G20 fue más suave que la del año pasado en Bali, ya que se eliminó una referencia directa a la "guerra contra Ucrania" y un párrafo que afirmaba que "la mayoría de los miembros condenaban enérgicamente la guerra en Ucrania". En su lugar, la declaración de este año insta a todos los estados a "actuar de manera coherente con los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas".
La comunidad internacional espera que estas fuertes declaraciones presionen a Rusia para que detenga la guerra en Ucrania y proteja el bienestar del pueblo ucraniano.