Los ataques coordinados en las líneas de tren de alta velocidad en Francia han generado una gran preocupación a pocas horas de la inauguración de los Juegos Olímpicos de París.
En Francia, una serie de incendios han afectado a las líneas de tren de alta velocidad justo antes de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de París.
La compañía ferroviaria SNCF ha calificado estos incidentes como un "ataque masivo destinado a paralizar la red", mientras que el ministro de Transporte del país ha condenado estos "actos maliciosos coordinados".
Los eventos del jueves por la noche han dejado a aproximadamente 800,000 usuarios afectados y se prevé que la interrupción continúe a lo largo del fin de semana.
Las autoridades y organizadores de los Juegos Olímpicos están alarmados, ya que se preparan para recibir a cientos de miles de espectadores en la capital, justo cuando miles de atletas están listos para navegar a través del corazón de la ciudad en embarcaciones durante el evento inaugural.
Los ataques han sido descritos como actos de sabotaje coordinado, lo cual ha hecho sonar las alarmas entre los organizadores del evento deportivo más importante del mundo.
La flotilla, que llevará a más de 10,000 atletas por el río Sena, pasará por delante de los principales monumentos de la ciudad, ante la mirada de 300,000 espectadores y una multitud de VIPs y celebridades.
La SNCF ha indicado que dichos ataques estaban diseñados para "paralizar" la red ferroviaria y anticipa una significativa disrupción durante todo el fin de semana.
"Este es un ataque de gran escala para paralizar la red del TGV", declaró un portavoz de SNCF a la agencia de noticias Agence France-Presse.
Como consecuencia de estos actos de sabotaje, el servicio Eurostar, que conecta el Reino Unido con Francia, se ha visto obligado a cancelar y desviar trenes.
La compañía ha confirmado que 800,000 clientes se han visto afectados en varias rutas a lo largo del oeste, norte y este de Francia.
Además, se informó que uno de los ataques fue "frustrado" por las autoridades.
Las advertencias sobre posibles intentos de sabotaje por parte de Rusia o de activistas políticos ya habían sido emitidas por funcionarios y agencias de seguridad.
Estas amenazas se suman a las preocupaciones sobre ataques terroristas, lo que pone bajo presión a las fuerzas del orden y a los organizadores de los Juegos Olímpicos, que ya están sobre alerta.
Thomas Bach, presidente del Comité Olímpico Internacional, se dirigió a los medios presentes en la villa de los atletas el viernes y expresó que no estaba preocupado por los acontecimientos recientes.
Sin embargo, la situación ha generado un ambiente tenso a medida que se acerca la apertura oficial del evento multinacional.
El impacto de estos ataques resuena no solo en el sector del transporte, sino que también plantea preguntas sobre la seguridad general de un evento de tal magnitud.
En la historia reciente de eventos olímpicos, Francia ha enfrentado desafíos en términos de seguridad, incluido el vertiginoso aumento de medidas de seguridad en torno a todos los Juegos Olímpicos tras eventos trágicos ocurridos en el país y en otras partes del mundo.