Coalición de izquierda gana las elecciones legislativas en Francia pero no obtiene mayoría absoluta, dejando al país en incertidumbre política

En París, una coalición de izquierda ganó la mayoría de los escaños en las elecciones legislativas de alto riesgo, según los resultados casi finales, haciendo retroceder un avance de extrema derecha pero sin lograr obtener una mayoría absoluta.

El resultado dejó a Francia ante la sorprendente perspectiva de un parlamento colgado y amenazó con una parálisis política en uno de los pilares de la Unión Europea y el país anfitrión de los Juegos Olímpicos.

Eso podría sacudir los mercados y la economía francesa, la segunda más grande de la UE, y tener implicaciones de gran alcance para la guerra en Ucrania, la diplomacia mundial y la estabilidad económica de Europa.

Al llamar a las elecciones el 9 de junio, después de que la extrema derecha avanzara en las votaciones francesas para el Parlamento Europeo, Macron dijo que enviar a los votantes de nuevo a las urnas proporcionaría 'claridad'. En casi todos los niveles, esa apuesta parece haber salido mal.

Hasta ahora, los resultados mostraron a Francia sumida en una neblina política, con los tres bloques principales -una coalición de izquierda, el partido de extrema derecha Nacional Rally y los centristas de Macron- todos muy lejos de los 289 escaños necesarios para controlar los 577 escaños de la Asamblea Nacional.

'Nuestro país se enfrenta a una situación política sin precedentes y se está preparando para dar la bienvenida al mundo en pocas semanas', dijo el primer ministro Gabriel Attal, quien planea ofrecer su renuncia el lunes.

Dijo que renunciar era el movimiento convencional después de que un partido gobernante no lograra obtener una mayoría.

Con los Juegos Olímpicos acercándose, dijo que estaba listo para quedarse en su puesto 'todo el tiempo que el deber exija'. Macron tiene tres años restantes en su mandato presidencial.

Attal dejó en claro más que nunca su desaprobación por la impactante decisión de Macron de convocar a las elecciones, diciendo 'No elegí esta disolución' de la saliente Asamblea Nacional, donde la alianza centrista del presidente solía ser el grupo más grande, aunque sin mayoría absoluta.

Aun así, pudo gobernar durante dos años, atrayendo a legisladores de otros campos para resistir los intentos de derribarlo.

La nueva legislatura parece estar desprovista de esa estabilidad.

Con la mayoría de los votos contados, la coalición de izquierda lideraba la alianza centrista de Macron, con la extrema derecha en tercer lugar.

Eso confirma la imagen también dada por las proyecciones de los encuestadores.