En World / Europe, AdvertisementFelicity Huffman ha admitido que se sintió una 'mala madre' si no pagaba para inflar los resultados de los exámenes de su hija y ayudarla a ingresar a la universidad.

Hablando sobre el escándalo de admisiones universitarias en Estados Unidos por primera vez desde que fue condenada, la actriz nominada al Oscar dijo que sentiría quebrantar la ley fue su 'única opción' para darle un futuro a su hija mayor.

Felicity Huffman fue liberada de prisión, 11 días después de una condena de 14 días.

Crédito: AP

Huffman, de 60 años, fue condenada a 14 días en una prisión de California en 2019 después de admitir que pagó $US15,000 para que un supervisor corrigiera secretamente las respuestas del examen SAT de su hija Sophia.

Conocida por su papel principal en la serie de televisión Desperate Housewives, Huffman fue la figura de mayor perfil involucrada en el escándalo de admisiones universitarias que reveló que padres adinerados habían quebrantado la ley para obtener la admisión de sus hijos en instituciones de alto nivel.

Al hablar con ABC News (US), ella dijo: 'Sé que el retrospectiva es perfecta, pero sentí que sería una mala madre si no lo hacía.

Entonces, lo hice.'

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Huffman había contratado al consultor Rick Singer, a quien 'confiaba implícitamente', para ayudar a Sophia a mejorar sus calificaciones y poder ingresar a la universidad.

'La gente asumió que me metí en esto buscando una forma de engañar al sistema y haciendo acuerdos criminales proverbialmente en callejones oscuros, pero no fue así', dijo ella.

'[Singer] recomendó programas y tutores, y él era el experto.

Y después de un año, comenzó a decir: 'Tu hija no podrá ingresar a ninguna de las universidades a las que desea.'