El Secretario de Defensa de los Estados Unidos, Lloyd Austin, ha ordenado el despliegue de un submarino de misiles guiados hacia Oriente Medio, al tiempo que ha instruido al grupo de portaaviones USS Abraham Lincoln a navegar más rápidamente hacia la región.

Este movimiento, confirmado por el Departamento de Defensa, responde a la preocupación de que Irán o sus representantes puedan lanzar un ataque contra Israel en el transcurso de esta semana.

Las tensiones en el área se han intensificado después del asesinato de Ismail Haniyeh, líder político de Hamas, en Teherán, y de un comandante de Hezbollah en Beirut.

La comunidad internacional, incluidas potencias occidentales, está presionando para que se alcance un acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamas, con la esperanza de reducir la escalada de violencia.

Las autoridades estadounidenses se mantienen vigilantes ante la posibilidad de represalias tanto de Irán como de Hezbollah tras los mencionados asesinatos.

John Kirby, portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, ha indicado que la respuesta de Irán podría producirse esta semana, aunque es complicado prever cómo sería un ataque por parte de Irán o de sus proxies.

"Estamos preparados para una serie de ataques significativos", aseguró Kirby, añadiendo que el presidente tiene confianza en la capacidad de defensa de Israel si fuera necesario.

Sin embargo, enfatizó que nadie quiere que se llegue a un enfrentamiento militar.

El mayor general Pat Ryder, secretario de prensa del Pentágono, anunció que Lloyd Austin había tenido una conversación con el Ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, reiterando el compromiso de Estados Unidos de tomar todas las medidas posibles para defender a Israel y destacando el fortalecimiento de la postura militar estadounidense en toda la región debido a la escalada de tensiones.

Una declaración conjunta de los líderes de Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania e Italia instó a Irán a cesar sus amenazas de ataque militar contra Israel, señalando las graves consecuencias que tendría un tal ataque para la seguridad regional.

El canciller alemán Olaf Scholz mantuvo conversaciones telefónicas con el presidente iraní Masoud Pezeshkian, manifestando su profunda preocupación por el riesgo de una conflagración regional en Oriente Medio.

Históricamente, la relación entre Estados Unidos e Israel ha sido una de alianza estratégica, especialmente en tiempos de conflicto.

Los Estados Unidos han mostrado un firme apoyo a Israel desde su creación en 1948, proporcionando asistencia militar y política.

En tiempos recientes, este apoyo se ha reflejado en la rápida movilización de recursos militares en respuesta a crisis regionales.

Es fundamental señalar que la situación se desarrolla en un contexto de inestabilidad en el Medio Oriente.

La historia reciente ha estado marcada por múltiples conflictos, como la Guerra Civil Siria y el enfrentamiento entre Israel y Hamas.

Los acontecimientos actuales resaltan la complejidad de la dinámica regional y la continua preocupación internacional por la paz y la seguridad en la zona.