Un escándalo en Indonesia envuelve a Ricky Olarenshaw, un jugador de la AFL, con acusaciones de infidelidad, irregularidades policiales y amenazas de otros ciudadanos australianos.
Un escándalo se ha desatado en Bali, Indonesia, donde el jugador de la AFL, Ricky Olarenshaw, se encuentra en el centro de una controversia que involucra un local de masajes, infidelidades y supuestas irregularidades policiales.
El abogado de Sarnanitha, esposa separada de Olarenshaw, ha declarado que su clienta ha sido objeto de explotación y que las acciones policiales en su contra han sido injustas.
Según el letrado, el 2 de septiembre tuvo lugar una redada en el 'Flame Spa Bali', donde supuestamente se encontraron pruebas de que empleados participaban en actividades de prostitución, un delito en Indonesia.
Sin embargo, Donny Tri Istiqomah, el abogado, sostiene que dicha redada fue un acto de represalia orquestado por socios comerciales australianos de la pareja.
Los problemas en la relación de Olarenshaw y Sarnanitha comenzaron a intensificarse en agosto, cuando ella descubrió que su marido le había sido infiel.
Este descubrimiento llevó a la separación de la pareja y dejó a los socios comerciales de Olarenshaw preocupados por su inversión, ya que Sarnanitha figuraba como la propietaria del negocio en papel.
Donny afirmó que el uso de un ciudadano indonesio era un método común entre los extranjeros para eludir las leyes de inversión en el país.
Además, se han filtrado mensajes de texto entre Sarnanitha y los cuatro socios australianos, en los que se percibe la tensión creciente tras la separación.
Un socio, cuyo nombre no se revela debido a que aún no ha podido responder, amenazó a Sarnanitha, indicando que contaba con el apoyo de "personas muy poderosas" si no realizaba un pago de dividendos, que supuestamente estaba reteniendo.
Las amenazas se volvieron más graves, con advertencias de acusaciones de tráfico sexual y fraude.
Según el abogado, se alega que dos de los socios australianos acompañaron a la policía durante la redada en el spa.
Uno de ellos presuntamente ordenó al personal que entregara las llaves del establecimiento, mientras que otro había preparado la entrada para la llegada de los agentes.
Donny cree que dos de los socios aún permanecen en Bali, pero asegura que Olarenshaw regresó a Australia tras la separación y no ha vuelto desde entonces.
Es importante señalar que no se sugiere ninguna irregularidad por parte del futbolista ni que él tuviera conocimiento de actividades ilegales en el local de Seminyak.
Este escándalo no solo involucra la vida personal de Olarenshaw, sino que también plantea preguntas sobre las dinámicas de poder y las prácticas comerciales en Bali, un popular destino turístico.
La historia refleja la complejidad de las relaciones personales entre ciudadanos extranjeros y locales, así como las implicaciones legales que pueden surgir en un contexto en el que la cultura y las leyes difieren significativamente.