El gobierno estadounidense confirma la llegada segura de sus pilotos tras un ataque a instalaciones nucleares en Irán y resalta la precisión de la operación.
La noticia fue difundida a través de la red social Truth, donde el mandatario agradeció públicamente a las aeronaves B-2, que supuestamente fueron las encargadas de ejecutar la ataque.
Según la versión oficial, las aeronaves lograron impactar en las instalaciones nucleares iraníes con una precisión que, supuestamente, dejó un daño 'monumental'.
Aunque no se han dado detalles exactos sobre la magnitud de los daños, fuentes anónimas cercanas al gobierno estadounidense indican que las instalaciones habrían sufrido golpes severos que podrían retrasar los programas nucleares iraníes por varios años.
Supuestamente, la operación fue planificada meticulosamente durante meses, aprovechando la tecnología más avanzada en aviones no tripulados y misiles de alta precisión.
La Fuerza Aérea de #EE.UU. utilizó las aeronaves B-2, conocidas por su capacidad para evadir sistemas de defensa antiaéreos, y que en esta ocasión demostraron su eficacia en una operación de alto riesgo.
El propio Trump expresó en su red social: 'Los grandiosos pilotos de las aeronaves B-2 acaban de aterrizar en Missouri a salvo. Gracias por un trabajo bien hecho'. Además, en sus declaraciones, el mandatario resaltó las habilidades de la fuerza #militar estadounidense y el éxito de la misión, que supuestamente fue llevada a cabo con una precisión casi quirúrgica.
Por otro lado, supuestamente, las autoridades iraníes aún no han confirmado oficialmente el alcance de los daños. Sin embargo, es probable que las instalaciones afectadas sean cruciales para el programa nuclear del país, lo cual incrementa la tensión en una región ya de por sí inestable.
Analistas internacionales han señalado que este tipo de ataques reflejan una escalada en la política de Estados Unidos hacia Irán
Analistas internacionales han señalado que este tipo de ataques reflejan una escalada en la política de Estados Unidos hacia Irán, que desde hace años busca limitar sus avances en energía nuclear mediante sanciones y acciones militares limitadas.
Aunque supuestamente, #Irán ha negado que estas instalaciones sean parte de su programa nuclear civil, las evidencias sugieren lo contrario.
Históricamente, Estados Unidos ha llevado a cabo varias operaciones similares en el pasado, como el famoso ataque en 1981 contra la instalación nuclear de Osirak en Irak, o la operación que destruyó el reactor nuclear en Siria en 2007.
Estas acciones, aunque controvertidas, son consideradas por algunos expertos como una muestra del compromiso de Washington en mantener su influencia en Oriente Medio.
