Washington: El autor del fallido atentado contra el expresidente Donald Trump, identificado como Thomas Matthew Crooks, realizó una búsqueda en Google una semana antes del ataque en la que se preguntaba "¿A qué distancia estaba Oswald de Kennedy?". Así lo informó el director del FBI, Christopher Wray, quien presentó nuevos detalles sobre un sospechoso que mostró un notable interés en figuras públicas, aunque no dejó evidencias claras de un motivo ideológico.

El 6 de julio, Crooks, de 20 años, registró esta búsqueda en un ordenador portátil que estaba vinculado a él, mencionando a Lee Harvey Oswald, el tirador que asesinó al presidente John F. Kennedy desde un edificio en Dallas el 22 de noviembre de 1963. Este particular interés suscita varias preguntas sobre el estado mental de Crooks, quien parece haberse registrado para asistir a un rally de Trump programado para el 13 de julio en Butler, Pensilvania.

En el tiroteo que tuvo lugar en el evento, una persona falleció y dos más resultaron heridas de gravedad, lo que ha llevado al FBI a clasificar el incidente como un acto de terrorismo doméstico.

Crooks fue abatido por un francotirador del Servicio Secreto, intensificando la investigación y la atención pública en un momento en que la nación se prepara para las elecciones presidenciales.

Este suceso ha revivido los ecos de otros intentos de atentados en la historia política de Estados Unidos, como el ataque contra el presidente Ronald Reagan en 1981. Desde entonces, el país ha vivido múltiples eventos de violencia política, elevando las preocupaciones acerca de la seguridad de las figuras públicas.

Mientras tanto, la investigación ha generado un intenso debate político, con legisladores y ciudadanos demandando claridad sobre lo que pudo haber motivado a Crooks para llevar a cabo el más serio intento de asesinato contra un presidente o candidato presidencial en décadas.

A pesar de los esfuerzos, el FBI ha admitido que no ha encontrado información concluyente sobre el motivo o la ideología detrás de este ataque, lo que deja muchas preguntas sin respuesta.

De acuerdo con Wray, el asesino actuó solo y su interés por figuras públicas no se limitaba a Trump; el sospechoso también poseía fotos en su teléfono del presidente demócrata Joe Biden y de otros líderes destacados.

Sin embargo, los días previos al ataque, había mostrado un interés particular por Trump, lo que añade una capa de complejidad sobre el motivo detrás de su acción.

El FBI continúa investigando, mientras la nación observa con atención los desarrollos en este caso que pone de relieve la tensión inherente en la política estadounidense moderna.

En ese contexto, es fundamental recordar el impacto de tales actos en la vida pública y el proceso democrático del país.