La organización que regula el idioma danés está preparando la próxima edición de su diccionario con el objetivo de incluir palabras equilibradas en términos de género, en un esfuerzo por promover la igualdad a través del lenguaje, una tendencia que se está produciendo en todo el mundo. El diccionario oficial de ortografía danesa, el Retskrivningsordbogen, se renovará en 2024 para hacer que el idioma sea más neutral en términos de género y abordar los estereotipos de género.
El Consejo del Idioma Danés, un organismo encargado de establecer normas que forma parte del Ministerio de Cultura de Dinamarca, ha revisado más de 1000 páginas del Retskrivningsordbogen para identificar palabras masculinas que no tienen equivalente femenino o actualizar definiciones anticuadas.
Según informó el canal de televisión danés DR, los investigadores han propuesto introducir un término en danés para 'hombre de carrera' que haga juego con el existente 'mujer de carrera'. 'Finansmand', que se traduce como 'financiero', es una de las varias palabras terminadas en '-mand' o 'hombre' que podrían tener un equivalente femenino, como 'finanskvinde' o 'financiera'. Según la propuesta, las definiciones de palabras que refuerzan estereotipos, como el uso de pronombres masculinos para describir a alguien acusado de homicidio, se reescribirían de manera más neutral en términos de género.
Según Margrethe Heidemann Andersen, investigadora principal del consejo y editora del diccionario, el proyecto ha despertado más atención en Dinamarca que los cambios rutinarios del consejo que regulan aspectos como el uso de las comas.
'Despierta emociones más fuertes cuando está relacionado con la identidad y el género', dijo.
Heidemann Andersen es una de los tres editores que trabajan en la nueva edición.
Describiendo el proceso a DR, explicó que revisaron cada palabra del Retskrivningsordbogen que termina en las palabras danesas para mujer, persona y hombre.
Evaluaron cómo se usan las palabras en el lenguaje cotidiano y qué tan comunes son.
En algunos casos, propusieron versiones femeninas de las palabras.
También propusieron agregar palabras neutras en términos de género y modificar algunas definiciones que usaban pronombres femeninos o masculinos de una manera que pudiera perpetuar estereotipos.