Dorian Puka, un criminal albanés deportado en dos ocasiones, vuelve a llamar la atención tras burlarse de Nigel Farage en redes sociales, mostrando su estilo de vida ostentoso.
En Londres, un delincuente albanés de 28 años, Dorian Puka, ha captado la atención de la prensa y las redes sociales tras burlarse del político británico Nigel Farage.
Puka, quien ha sido condenado en dos ocasiones por robos y deportado de Gran Bretaña, ha recurrido a las plataformas de TikTok e Instagram para mostrar su vida ostentosa, provocando reacciones de indignación entre aquellos que defienden una política de inmigración más estricta.
Recientemente, Dorian Puka publicó una foto en la que se le ve en una mesa de cena disfrutando de una comida y una bebida, junto a una imagen editada de Farage dándole el visto bueno.
Esta provocación se produce en un contexto en el que Farage ha criticado enérgicamente a Puka por desafiar su deportación, refiriéndose a él como 'un verdadero delincuente'. En días anteriores, Puka compartió un video de 90 segundos en el que se le veía conduciendo un lujoso Ferrari valorado en 276,000 euros, que equivalen a aproximadamente 300,000 libras esterlinas, por las calles de Londres.
Las acciones de Puka generaron desprecio por parte de Farage, quien lamentó que el Ministerio del Interior británico no pudiera expulsarlo hasta que su solicitud de asilo fuera completamente evaluada.
“Literalmente, estamos siendo pisoteados por él”, señaló Farage, quien ha sido un ferviente defensor de la inmigración controlada en el Reino Unido.
La situación de Puka no es aislada, ya que pone de manifiesto las deficiencias del sistema legal en la gestión de la llegada de inmigrantes y la capacidad del país para hacer frente a estos casos.
Dorian Puka no es nuevo en el ámbito del crimen en el Reino Unido.
En 2016, fue condenado a nueve meses de prisión tras intentar entrar en una propiedad, donde el propietario lo descubrió a través de una cámara web mientras estaba de vacaciones en Francia.
No obstante, regresó a Gran Bretaña un año después, eludiendo los controles fronterizos y reanudando su carrera delictiva en el área suburbana de Londres, donde llevó a cabo una serie de robos.
La controversia en torno a Puka y su desafiante actitud hacia las autoridades británicas resuena en la discusión más amplia sobre la inmigración y la efectividad de las políticas del Reino Unido para controlar el ingreso de extranjeros con antecedentes delictivos.
La llegada de inmigrantes con este tipo de historial es un tema de creciente preocupación para muchos ciudadanos británicos, que claman por una reforma en la política de asilo y desearían ver medidas más efectivas para evitar que criminales vuelvan a entrar al país.
La presencia de Puka en las redes sociales, junto con su comportamiento provocador, también subraya una nueva forma en que los inmigrantes con antecedentes penales pueden desafiar a la sociedad y, específicamente, a los políticos populistas como Farage.
La ironía no se escapa a muchos: un individuo que debería estar residiendo en su país de origen se ha convertido en el centro de atención en un país donde sus acciones han dejado perplejos a los defensores de las políticas de inmigración.