En su intento por frenar el avance de China en la región del Pacífico, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunió nuevamente con los líderes de las islas del Pacífico en la Casa Blanca.

Este encuentro, organizado por el Foro de las Islas del Pacífico (PIF), buscó fortalecer los lazos entre Estados Unidos y estas naciones insulares.

Durante la ceremonia de bienvenida, Biden anunció el reconocimiento diplomático de dos nuevas naciones isleñas: las Islas Cook y Niue.

Este gesto evidencia el compromiso de Estados Unidos de asegurar una región del Indo-Pacífico libre, abierta, próspera y segura.

Además, el presidente norteamericano anunció su intención de destinar 200 millones de dólares adicionales para financiar proyectos en la región.

Estos proyectos tendrán como objetivo mitigar los efectos del cambio climático, impulsar el crecimiento económico, combatir la pesca ilegal y mejorar la salud pública.

La reunión concluyó con la firma de una Declaración Conjunta en la que se acordó celebrar otra cumbre en 2025 y establecer encuentros políticos cada dos años.

Esta iniciativa busca fortalecer la cooperación entre Estados Unidos y las islas del Pacífico en diversos ámbitos.

Sin embargo, la ausencia del primer ministro de las Islas Salomón, Manasseh Sogavare, generó decepción en la administración de Biden.

Sogavare, quien ha estrechado lazos con China, decidió no asistir a la reunión.

A pesar de esto, el presidente Biden reafirmó el compromiso de Estados Unidos de trabajar junto a todas las naciones de la región para alcanzar los objetivos propuestos.

El encuentro en la Casa Blanca es parte de la estrategia de la administración de Biden para contrarrestar la creciente influencia de China en el Pacífico.

Esta estrategia busca fortalecer el liderazgo de Estados Unidos en la región y promover los valores democráticos y el respeto por los derechos humanos.