La ausencia de Taiwán en la 21ª Cumbre de Shangri-La en Singapur destaca las tensiones en el estrecho de Taiwán
Durante tres días la semana pasada, el hotel Shangri-La en Singapur estaba repleto de líderes políticos, ministros de defensa y altos mandos militares de todo el mundo, todos allí para asistir al 21º Diálogo de Shangri-La, la principal conferencia de seguridad para la región de Asia-Pacífico.
Este año, la cumbre será recordada por la sorpresiva aparición del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, quien personalmente solicitó a los líderes asiáticos que respalden su cumbre de paz en Suiza la próxima semana.
Sin embargo, fue la crítica enérgica de Zelensky hacia China lo más revelador, dejando al descubierto las frustraciones de Kiev con Pekín, que reclama neutralidad en el conflicto a pesar de su asociación "sin límites" con Moscú. Zelensky afirmó que el apoyo de China a Rusia prolongaría la guerra, alegando que hay elementos del armamento ruso "que provienen de China", y acusando a China de colaborar con Rusia para sabotear la cumbre de paz.
Pero las conversaciones fueron notables por otra razón: la ausencia de representantes oficiales del gobierno de Taiwán en ninguno de los paneles o eventos hablados, a pesar de las crecientes tensiones en el estrecho de Taiwán.
La falta de presencia taiwanesa en la cumbre resalta las ambigüedades que enfrenta Taiwán, que ocupa un estatus intermedio entre una isla autónoma y un país.
La ausencia de una representación formal de Taiwán en las conversaciones permitió al nuevo ministro de Defensa de China, Dong Jun, emitir una amenaza contundente de aplastar cualquier "conspiración" independentista de Taiwán o sus aliados estadounidenses.
La falta de participación de Taiwán en las discusiones sobre la posibilidad de una invasión es típica para la isla, que se encuentra en una situación ambigua.
La tensión entre China y Taiwán es un tema crucial que perturba la región de Asia-Pacífico, y la ausencia de Taiwán en la cumbre de Shangri-La es un recordatorio de las complejidades geopolíticas en juego.