México logró su décimo título en la Concacaf Gold Cup tras derrotar a Estados Unidos en una final marcada por la revisión del VAR y una actuación destacada de Edson Álvarez. El encuentro se disputó en Houston ante una multitud casi completamente favorable a la selección mexicana, consolidando aún más su dominio en la región. La final, que se convirtió en un enfrentamiento lleno de emociones, fue el último partido competitivo para ambos equipos antes de coorganizar el Mundial de 2026 con Canadá.

El partido se llevó a cabo en el NRG Stadium de Houston, ante una afición de aproximadamente 70.000 espectadores, de los cuales alrededor del 70% apoyaba claramente a la selección mexicana. La entrega y pasión que desplegaron los jugadores mexicanos fueron evidentes desde el inicio del encuentro, que estuvo lleno de momentos de tensión y rostros emocionados.
El encuentro empezó con intensidad por parte del equipo estadounidense, que tomó la iniciativa y se adelantó en el marcador en el cuarto minuto gracias a un cabezazo de Chris Richards, que aprovechó un centro de Sebastian Berhalter tras un tiro libre.
La reacción de #México no se hizo esperar, y seis minutos después, Raúl Jiménez igualó la contienda con su tercer gol en esta edición de la Copa, celebrando con una muestra emotiva dedicada a su amigo Diogo Jota, quien falleció en un accidente de tránsito en España en la semana anterior.
El partido avanzó con ambos equipos buscando el gol que les diera la ventaja definitiva. Sin embargo, fue en el segundo tiempo donde México logró lo que parecía difícil: un gol que aseguró su título, en la jugada decisiva del encuentro.
En el minuto 77, Edson Álvarez anotó tras una revisión del VAR que anulación la decisión inicial de fuera de juego. Álvarez, que previamente había tenido un papel destacado en la defensa y en la creación de juego, recibió un pase tras un saque de esquina y, con una remate preciso, venció al arquero Matt Freese desde cerca, en una acción que fue celebrada con gran entusiasmo por la afición mexicana.
Este gol fue vital, ya que anteriormente la igualdad parecía mantenerse, y la revisión del VAR fue decisiva para validar la anotación de Álvarez.
Estados Unidos buscó con ímpetu el empate
La decisión generó cierta polémica entre algunos hinchas estadounidenses, pero fue acatada y celebrada por los seguidores mexicanos. En los minutos finales, #Estados Unidos buscó con ímpetu el empate, pero la defensa mexicana, ordenada y sólida, logró resistir los embates. Un disparo de Patrick Agyemang en los últimos minutos fue detenido por el arquero mexicano Luis Malagón, asegurando la victoria.
Con este resultado, México obtiene su décimo título en la Gold Cup, ampliando su liderazgo en la historia de la competencia. Además, esta final consolidó la hegemonía mexicana en la región, frente a un Estados Unidos que, aunque mostró avances en su juego, no pudo revertir el marcador en los minutos finales.
Este partido también fue importante en el contexto de preparación para el Mundial de 2026, que ambos países coorganizarán. La mayoría de los jugadores que participaron en este encuentro son jóvenes talentos que buscan un lugar en las próximas convocatorias del torneo mundial.
Historicamente, México ha sido uno de los equipos más destacados en el #fútbol de la región y ha logrado 11 títulos de la Copa Oro si contamos también los logros anteriores.
La rivalidad con Estados Unidos, que domina en cantidad de participaciones y títulos en la región, mantiene en vilo a los aficionados de ambos lados, pero en esta ocasión, la selección mexicana logró imponerse con autoridad.
Este triunfo no solo significa un premio deportivo, sino también un ejemplo de la pasión y la tradición futbolística mexicana, que sigue conquistando corazones y rompiendo récords en Norteamérica.