Las festividades en Francia tras la consagración del Paris Saint-Germain en la Champions League se saldaron con dos muertes, más de 180 heridos y más de 500 arrests, según informes oficiales. Los incidentes ocurrieron durante las mayores concentraciones en la capital y otras ciudades del país.
El pasado domingo, las celebraciones en Francia por la primera conquista de la Liga de Campeones por parte del Paris Saint-Germain terminaron en tragedia y disturbios, con un saldo de dos personas fallecidas y más de 180 heridas, además de más de 500 arrestos, según informó el Ministerio del Interior.
Los aficionados del club parisino salieron a las calles con entusiasmo para conmemorar la histórica victoria ante el Inter de Milán, que les otorgó el título europeo por primera vez en su historia.
La alegría contagiosa se manifestó en diferentes puntos de la ciudad, especialmente en la avenida de los Campos Elíseos, donde miles de seguidores celebraron la hazaña.
No obstante, el ambiente festivo pronto se convirtió en un escenario de violencia y desórdenes. Durante la noche, en diversos puntos de París, se registraron incidentes como disturbios, quema de vehículos y ataques a la propiedad pública y privada.
En total, las autoridades informaron que más de 200 vehículos fueron incendiados y diversas instalaciones resultaron dañadas.
Desde tempranas horas del domingo, el Ministerio del Interior francés reportaba la detención de 559 personas, principalmente en París, donde fueron arrestadas 491 individuos.
De estos, 320 permanecen bajo custodia policial. Los enfrentamientos se extendieron más allá de París hacia otras ciudades del país, generando un escenario de caos.
Las fuerzas policiales utilizaron gases lacrimógenos y cañones de agua para contener a las multitudes que intentaban avanzar por las principales arterias de la capital, en particular en la famosa avenida de los Campos Elíseos, donde también se reportaron enfrentamientos con los agentes y actos de vandalismo.
Sinclair falla un penalti mientras Canadá empata con Nigeria en el partido inaugural de la Copa del Mundo Femenina
Christine Sinclair, la delantera del equipo de Canadá, falló un penalti en el empate 0-0 contra Nigeria en el primer partido de la Copa del Mundo Femenina. La arquera Chiamaka Nnadozie fue clave para el equipo nigeriano al detener el tiro desde el punto penal. A pesar del resultado, el grupo queda abierto para ambos equipos.Estas escenas de violencia empañaron una celebración que comenzó con gran alegría. La final de la Champions League, disputada en Francia, generó expectativas y entusiasmo en todo el país, consolidándose como uno de los eventos deportivos más importantes del año.
Sin embargo, la respuesta de algunos sectores de hinchas y grupos marginales fue desproporcionada, afectando la imagen del país y la situación de seguridad.
El balance final incluye también que al menos 22 miembros de las fuerzas de seguridad y siete bomberos resultaron heridos en las confrontaciones, y numerosos incidentes de incendio, que afectaron tanto a vehículos como a mobiliario urbano.
Autoridades locales y nacionales están trabajando para identificar a los responsables y evitar que estos sucesos se repitan en futuras celebraciones.
Este fenómeno de festejos masivos que terminan en incidentes no es exclusivo de Francia. A lo largo de la historia, grandes eventos deportivos han provocado encuentros similares en diferentes países, en algunos casos con consecuencias trágicas.
La UEFA y las autoridades francesas reiteraron su compromiso de fortalecer las medidas de seguridad para futuras competencias.
En conclusión, si bien la victoria del PSG en la Liga de Campeones fue motivo de alegría para los hinchas y seguidores del fútbol, también dejó una lección importante sobre la necesidad de controlar las celebraciones y prevenir la violencia en eventos deportivos de gran magnitud.
