El equipo femenino de fútbol de Canadá ha logrado escalar dos posiciones en el ranking mundial de la FIFA, ubicándose en el sexto lugar, a pesar de los problemas que han ensombrecido su participación en los recientes Juegos Olímpicos de París 2024.

Este avance se produce en un periodo complicado para el equipo, marcado por un escándalo de espionaje durante los Juegos que resultó en una penalización de seis puntos y la destitución de su entrenador, Bev Priestman.

De todos modos, las futbolistas canadienses se sobrepusieron a los retos y demostraron su capacidad en el campo, logrando victorias sobre selecciones de Francia, Nueva Zelanda y Colombia.

Históricamente, Canadá ha alcanzado su mejor posición número 4 en marzo de 2018, y aunque no pudieron regresar a casa con una medalla olímpica, su desempeño les valió este nuevo lugar en la clasificación.

Durante la fase de eliminación directa, el equipo canadiense enfrentó a Alemania, donde fue eliminado en una tanda de penales.

La FIFA tomó medidas drásticas tras el escándalo y prohibió a Priestman y a dos miembros de su equipo participar en el fútbol por un año.

En respuesta a la controversia, Canadá Soccer ha iniciado una revisión independiente para aclarar los hechos.

A pesar de los contratiempos, las jugadoras han dejado claro que su unidad y profesionalismo prevalecerán ante cualquier adversidad.

El equipo ha demostrado ser resiliente, especialmente con actuaciones destacadas como la de Vanessa Gilles, quien anotó dos goles decisivos en los partidos previos a los cuartos de final.

Sinclair falla un penalti mientras Canadá empata con Nigeria en el partido inaugural de la Copa del Mundo Femenina

Christine Sinclair, la delantera del equipo de Canadá, falló un penalti en el empate 0-0 contra Nigeria en el primer partido de la Copa del Mundo Femenina. La arquera Chiamaka Nnadozie fue clave para el equipo nigeriano al detener el tiro desde el punto penal. A pesar del resultado, el grupo queda abierto para ambos equipos.

El ranking femenino de la FIFA también ha visto movimientos significativos.

Mientras que Estados Unidos, al ganar la medalla de oro en París, volvió a ocupar el primer lugar, Inglaterra avanzó al segundo puesto.

Por su parte, España, que había dominado hace poco, descendió al tercer lugar tras sufrir derrotas en las instancias finales.

En el contexto de la competencia internacional, también hay que mencionar que Suecia se mantuvo competitivo al escalar un puesto hasta el quinto lugar, mientras que Japón y Brasil, medallista de plata olímpica, ocupan el séptimo y octavo lugar respectivamente.

Sin embargo, no todos los equipos han tenido suerte.

Francia ha caído dramáticamente al décimo puesto, su posición más baja desde septiembre de 2019, tras ser eliminados por Brasil y perder ante Irlanda.

Colombia y Nueva Zelanda, que formaron parte del grupo de Canadá en la competencia, también han visto cambios en sus posiciones.

Colombia alcanzó su mejor clasificación en el puesto 21, mientras que Nueva Zelanda descendió al 31. Esta situación resalta el dinamismo del fútbol femenino, donde equipos continúan luchando por hacerse un nombre en el escenario mundial.

A pesar de que Canadá no volvió de París con medalla, su lucha y logros en el campo han sido un testimonio de su dedicación y pasión por el fútbol.

Las jugadoras, en su propia narrativa, se han negado a ser definidas por el escándalo, eligiendo celebrar su historia y sus logros.