El entrenador Jesse Marsch espera que el éxito de Canadá en la Copa América atraiga a más jugadores de doble nacionalidad para jugar en la selección canadiense.
El entrenador Jesse Marsch de la selección de Canadá tiene grandes expectativas luego del desempeño de su equipo en la Copa América.
Tras una destacada actuación en el torneo, Marsch espera atraer a más jugadores de doble nacionalidad para unirse al equipo de cara al Mundial de 2026. La selección canadiense logró vencer a Venezuela en cuartos de final antes de caer 2-0 ante los campeones Argentina y Lionel Messi en semifinales.
Luego, los canadienses dieron pelea a la favorita Uruguay en el partido por el tercer lugar, pero perdieron en penales.
Marsch afirmó que el éxito en la Copa América puede hacer que el proceso de reclutamiento sea más sencillo y efectivo.
Canadá, como país anfitrión junto a Estados Unidos y México, tiene asegurado un puesto en el próximo Mundial.
Marsch ha identificado hasta 10 jugadores de doble nacionalidad para evaluar y fortalecer la plantilla de cara al torneo.
A pesar de no revelar nombres, se especula que la lista incluye a destacados futbolistas como Daniel Jebbison de AFC Bournemouth, Luca Koleosho de Burnley y Mohamed Farsi de Columbus Crew, entre otros.
Asimismo, se destaca el caso del capitán de Vancouver Whitecaps, Ryan Gauld, que podría optar por la ciudadanía canadiense y sumarse al equipo.
A lo largo de los años, Canadá ha tenido altibajos en la convocatoria de jugadores de doble nacionalidad.
Sin embargo, gracias a su participación en el Mundial de 2022, el país ha logrado atraer a más futbolistas con doble nacionalidad.
Marsch, además de enfocarse en fortalecer la selección, tiene como objetivo desarrollar el fútbol en Canadá y mejorar la infraestructura para fomentar el talento desde temprana edad.
El entrenador señala la importancia de identificar y desarrollar talentos más jóvenes para lograr un crecimiento sostenido en el deporte.
Con el firme propósito de dar lo mejor de sí, Marsch busca conformar un equipo sólido y competitivo para el Mundial de 2026, apelando a la dualidad de nacionalidades como un factor enriquecedor para la selección canadiense.