En Euskadi, un grupo de ocho bodegas de Rioja Alta y Rioja Alavesa ha decidido formar la nueva asociación llamada 'Subsierra', cuyo objetivo es promover la elaboración de vinos mediante prácticas de agricultura ecológica.

Este ambicioso proyecto busca realzar la calidad y el prestigio de sus productos, en un contexto donde el sector vitivinícola enfrenta importantes desafíos relacionados con la sostenibilidad y la demanda actual del mercado.

La presentación oficial tuvo lugar en la Casa del Cordón de Vitoria-Gasteiz, donde Amaia Barredo, consejera de Alimentación, Desarrollo Rural, Agricultura y Pesca del Gobierno, estuvo presente para respaldar esta iniciativa.

Las bodegas que integran Subsierra son: Artuke, Tierra, Carlos Sánchez, Loli Casado, Teodoro Ruiz Monje, Amaren, Ostatu y Tentenublo.

Cada una de estas bodegas aporta su propia experiencia y tradición vitivinícola, sumando en total una extensión de 318 hectáreas, donde la mayoría de su producción ya se lleva a cabo bajo criterios ecológicos.

La ubicación geográfica de estas bodegas es significativa, ya que se encuentran en la antigua comarca conocida como 'Sonsierra navarra', a lo largo del río Ebro, desde Briñas hasta Moreda.

Esta región histórica ha sido reconocida por la calidad de sus viñedos, y ahora los nuevos integrantes de Subsierra han marcado como prioridad la elaboración de sus vinos a partir de viñas viejas, que generalmente producen menores cantidades pero de superior calidad.

Esto implica un enfoque más laborioso y manual, ya que se comprometen a realizar la vendimia sin el uso de máquinas, lo que garantiza un cuidado meticuloso en la recolección de las uvas.

El presidente de Subsierra, Juan Luis Cañas, subrayó la importancia de esta unión para fortalecer la calidad de los vinos producidos.

"Estamos decididos a dar un paso al frente en la calidad de nuestros productos, lo que también incluye asegurar un precio justo para los viticultores que nos suministran uvas", comentó Cañas, resaltando la importancia de una relación justa y equitativa con sus proveedores.

Además, enfatizó que las uvas utilizadas provendrán exclusivamente de la comarca de Subsierra, lo que refuerza su compromiso con el desarrollo local y sostenible.

Esta agrupación surge en un momento crítico para la denominación de origen Rioja, que enfrenta un turismo vinícola cada vez más competitivo y un exceso de producción que ha llevado a muchos viticultores a buscar nuevas alternativas para diferenciarse en el mercado.

La asociación Subsierra se presenta como una solución viable que integra la tradición vitivinícola con prácticas modernas de sostenibilidad, lo que podría ser clave para revitalizar esta parte emblemática de Euskadi.

En la actualidad, el interés por los vinos ecológicos sigue en aumento en Europa, donde los consumidores buscan cada vez más productos que no solo sean de alta calidad, sino que también respeten el medio ambiente.

La creación de Subsierra representa un paso adelante en la consecución de estos objetivos, ofreciendo una oferta atractiva tanto para el mercado local como para el internacional.

Con esta iniciativa, estas ocho bodegas pretenden no solo brindar unos vinos excepcionales sino también inspirar a otros productores a unirse a la causa de la sostenibilidad en el sector vitivinícola.