En Euskadi, un total de 149 jóvenes han alcanzado sus objetivos de emancipación gracias al programa Trapezistak, permitiéndoles desenvolverse de manera autónoma y salir del programa de apoyo.

El perfil típico de estos jóvenes es el de un hombre de aproximadamente 22,7 años, que ha migrado sin compañía familiar y lleva más de 18 meses residiendo en Euskadi.

Muchos de ellos se encuentran en proceso de formación o empleo, viviendo en un entorno urbano y construyendo una red de apoyo social importante.

El programa Trapezistak se estableció en 2022, aunque sus raíces se remontan a un proyecto piloto creado en responder a las necesidades surgidas durante la pandemia.

Este programa está diseñado para acompañar a jóvenes sin redes de apoyo familiar en su transición hacia la vida adulta y la inclusión social.

Durante 2023, el alcance del programa ha crecido significativamente.

Se han unido 25 entidades del Tercer Sector Social que actúan en diferentes localidades, incluyendo Laudio, Amurrio, Gasteiz, Hernani, Tolosa, Donostia, Barakaldo, Getxo, Etxebarri, Arrigorriaga y Bilbao.

El objetivo central de Trapezistak es formular un modelo de apoyo enmarcado en políticas de juventud y migraciones, brindando un acompañamiento efectivo a aquellos jóvenes que no cuentan con apoyo familiar.

Para ello, se fundamenta en tres criterios principales: personalización, integralidad y cooperación intersectorial.

En 2023, del total de 606 jóvenes que fueron acompañados en el programa, un 40% -equivalente a 242 personas- fueron nuevos ingresos.

Un dato significativo es que 206 jóvenes abandonaron el programa, de los cuales el 72%, es decir, 149, lograron cumplir con los objetivos de emancipación.

El perfil más común entre los participantes del programa es el de un joven varón migrante, principalmente de Marruecos.

Este grupo lleva más de 18 meses en Euskadi, tiene un empadronamiento y acceso a la atención sanitaria, y está en proceso de establecer una red de apoyo social.

Trapezistak se integra en el Pacto Social Vasco para la Migración y forma parte de una amplia red de iniciativas que componen el Modelo Vasco de Acogida.

Esta red enfatiza la importancia de la coordinación institucional, destacando el papel de los municipios en la promoción de la convivencia y la inclusión multicultural.

El impacto del programa en la regularización administrativa de los jóvenes es notable: el 29% ha logrado algún tipo de autorización de residencia, el 78% está empadronado y el 85% posee una Tarjeta Individual Sanitaria.

Para ayudar en la inclusión social, Trapezistak concentra esfuerzos en seis dimensiones esenciales: administrativa, educativa, vivienda, desarrollo personal, capital social y empleo.

Además, el programa facilita la formación necesaria para el acceso al mercado laboral, un paso crucial para la plena integración comunitaria.

En 2022, el análisis de los 606 jóvenes acompañados mostró que un 36% obtuvo un Certificado de Profesionalidad, un 25% finalizó con éxito la Formación Profesional Básica, y un 88% continuó en procesos formativos hacia una titulación oficial.

Finalmente, 87 jóvenes lograron un contrato laboral regularizado de más de un año en 2023, mientras que otros 18 también consiguieron integrarse al mercado laboral aunque no cumplan con todos los criterios establecidos para ser considerados como objetivos alcanzados.