El Vicelehendakari y consejero de Economía, Trabajo y Empleo de Euskadi, Mikel Torres, ha confirmado en una reciente entrevista que en el primer semestre del año 2024 se impulsará un salario mínimo de convenio.

Esta iniciativa forma parte de un conjunto de medidas que el Gobierno Vasco busca implementar para mejorar las condiciones laborales en la región.

Torres ha calificado como 'muy positivo' el proyecto de presupuestos para 2025 que ha sido presentado, y ha reiterado que el Gobierno está dispuesto a dialogar y colaborar con todos los grupos políticos para su aprobación.

Al instar a EH Bildu, el principal partido de la oposición, a que apoye este proyecto 'por responsabilidad', Torres ha manifestado que el Gobierno Vasco nunca se ha cerrado a la negociación.

'Si no obtuviera su apoyo, estaría decepcionando a muchas personas', añadió, enfatizando la necesidad de un compromiso colectivo para avanzar hacia una sociedad más justa y equitativa.

El salario mínimo de convenio, según Torres, no solo beneficiará a los trabajadores directamente, sino que también tendrá un efecto positivo en el consumo privado, promoviendo así una mayor actividad económica en la región.

Esta medida es parte de una estrategia más amplia destinada a reducir el desempleo y el absentismo laboral, asegurando un entorno laboral más saludable y productivo.

En el marco de esta estrategia, el Gobierno Vasco está trabajando también en la creación de una nueva cultura empresarial que fomente la reducción de la jornada laboral.

Percepción de la juventud en Euskadi sobre la inmigración extranjera

A través de una encuesta online realizada por el Observatorio Vasco de la Juventud, se obtuvieron datos sobre la percepción de los jóvenes en Euskadi respecto a la inmigración extranjera. Estos datos muestran cambios en los últimos años y revelan opiniones divididas sobre la cantidad de personas extranjeras en la región.

Esta propuesta se adaptará a las características de cada empresa, promoviendo un equilibrio entre la vida laboral y personal de los trabajadores.

La idea es que una jornada laboral más corta no solo puede llevar a un aumento del bienestar de los empleados, sino también a un incremento en la productividad de las empresas.

Históricamente, Euskadi ha sido una región con una fuerte tradición industrial y, a lo largo de los años, ha transitado por diversas fases económicas.

Desde el auge de la industria de construcción naval hasta la diversificación en sectores como la tecnología y los servicios, la economía vasca siempre ha buscado adaptarse y evolucionar.

Sin embargo, la crisis económica de 2008 y sus secuelas dejaron profundas huellas, lo que ha impulsado a las autoridades a repensar sus estrategias de desarrollo económico y social.

Con el objetivo de consolidar un crecimiento inclusivo, el Gobierno Vasco se propone no solo elevar el salario mínimo de convenio, sino también introducir otras políticas que busquen mejorar la calidad del empleo y garantizar condiciones laborales dignas para todos.

Con un enfoque firme en el diálogo y la colaboración interpartidaria, se espera que este enfoque contribuya a la construcción de un futuro más prometedor para la economía de la región.