El Departamento de Seguridad de Euskadi firma un acuerdo con universidades para ofrecer a estudiantes de grado y máster prácticas profesionales en la Ertzaintza, fomentando la formación práctica y el contacto con la realidad laboral.
Este acuerdo, que tendrá una vigencia de cuatro años, busca que los estudiantes de grados y másteres puedan realizar prácticas curriculares en los centros de trabajo del cuerpo policial.
La iniciativa está orientada a mejorar su #formación práctica, permitiéndoles experimentar de primera mano las operaciones y funciones de la Ertzaintza, y adaptando la experiencia académica a las circunstancias reales de la #seguridad pública.
La colaboración no contempla una contraprestación económica para las universidades o los estudiantes, ya que su principal finalidad es estrechar lazos entre el ámbito académico y la realidad profesional.
La iniciativa responde a una tendencia global en la #educación superior, donde la formación en entornos laborales reales es clave para preparar a futuros profesionales.
Este tipo de programas formativos no es exclusivo de Euskadi; en otros países europeos, como Alemania o los Países Bajos, las prácticas curriculares en las fuerzas de seguridad y otras instituciones públicas son comunes, promoviendo un aprendizaje basado en la experiencia práctica.
La #Ertzaintza ha tenido una historia de colaboración con instituciones educativas desde hace décadas
Además, la Ertzaintza ha tenido una historia de colaboración con instituciones educativas desde hace décadas. En la década de los 80, por ejemplo, ya se comenzaron las primeras prácticas para estudiantes en temas de criminología y seguridad ciudadana, marcando el inicio de un interés constante por vincular la academia y la formación profesional.
El convenio también refleja la apuesta de #Euskadi por potenciar la formación de la juventud y facilitar su entrada al mercado laboral. La experiencia práctica que ofrecen estas prácticas ayuda a los estudiantes a desarrollar habilidades, entender las dinámicas laborales y mejorar sus perspectivas profesionales tras finalizar sus estudios.
Asimismo, en un contexto más amplio, la formación en el sector de seguridad es esencial para afrontar los crecientes retos sociales y tecnológicos.
La tecnología en la seguridad pública avanza rápidamente, con la incorporación de sistemas de vigilancia inteligentes, análisis de datos y ciberseguridad, por lo que preparar a los futuros profesionales en un entorno real resulta fundamental.
En cuanto a los costes, aunque en esta iniciativa no hay contraprestación económica, el valor de la formación práctica representa una inversión en capital humano, que a largo plazo puede traducirse en una sociedad más segura y mejor preparada.
La actualización constante de los conocimientos y habilidades de los futuros agentes de la ley es, por tanto, una prioridad para el Gobierno Vasco y sus socios académicos.
