El Gobierno Vasco destinará 3,6 millones de euros para apoyar a las explotaciones vitícolas en Rioja Alavesa y txakoli, y fortalecerá las misiones comerciales en Japón y México ante la crisis del sector. La iniciativa busca proteger a productores y promover la innovación en un contexto de dificultades económicas y climáticas.

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Durante el encuentro, se destacó la importancia de proteger a las y los productores en un escenario de múltiples desafíos.

El Gobierno Vasco anunció una ayuda extraordinaria de aproximadamente 3,6 millones de euros (equivalente a unos 3,2 millones de euros en moneda local), destinados a cubrir las necesidades de las explotaciones vitícolas en Rioja Alavesa y en la región del txakoli.

La iniciativa, que tendrá una vigencia desde diciembre de 2023 hasta finales de 2026, busca aliviar las dificultades económicas y garantizar la continuidad de estas explotaciones.

Las ayudas, que se distribuirán de forma ágil, llegarán a los productores sin necesidad de presentación de solicitudes, pues se basarán en los datos existentes en los registros oficiales y en la Denominación de Origen Rioja.

El Lehendakari subrayó además que el contexto actual del sector está marcado por una serie de adversidades: bajas cosechas, aumento de los costes de producción y una caída en las ventas internacionales.

En concreto, las exportaciones de vino han registrado una disminución del 7,5% en las últimas tres campañas, en una acción que, a pesar de reducir la producción, no ha logrado detener el descenso en el consumo global.

Factores geopolíticos como el Brexit y la invasión de Ucrania por Rusia han generado inestabilidad en mercados clave, además de los efectos del cambio climático, que han causado lluvias excesivas en primavera, enfermedades como el mildiu y una sequía en verano.

Todo ello ha provocado pérdidas en las cosechas y un incremento en los costos de producción, que han contribuido a que los rendimientos sean los más bajos en varios años.

Ante esta situación, el Gobierno Vasco ha decidido intensificar sus esfuerzos en promoción internacional y comercio exterior. Se han establecido misiones comerciales en mercados potenciales como Japón y México, con el objetivo de diversificar las exportaciones y abrir nuevas oportunidades.

Además de requerir una reestructuración en las ayudas de la Política Agraria Común (PAC)

Estas acciones se complementan con una estrategia de innovación y mejora de la competitividad, además de requerir una reestructuración en las ayudas de la Política Agraria Común (PAC), en línea con las peticiones desde Euskadi.

La consejera Amaia Barredo afirmó que “el apoyo al sector vitivinícola en #Euskadi no solo es una ayuda económica, sino un compromiso con la creación de empleo, la calidad de los productos locales y el fortalecimiento de la economía rural”.

La ayuda directa concedida se dirigirá a viticultores con parcelas en Rioja Alavesa, con un importe que podrá llegar hasta 20.000 euros por explotación, distribuidos en función del rendimiento en la vendimia de 2025.

Estas subvenciones benefician tanto a productores asociados a la DOCa Rioja como a aquellos que trabajan fuera de la denominación, siempre que cumplan con los requisitos de tamaño y rendimiento mínimo, que se han fijado en al menos 1.000 kg/ha. La ayuda contempla diferentes tramos, con mayores aportaciones para explotaciones con menor producción y un incremento del 50% en las parcelas ecológicas, promoviendo prácticas sostenibles.

Este paquete de medidas es un paso importante para afrontar los retos actuales del vino en Euskadi, sector que ha sido uno de los más afectados por la pandemia, la inestabilidad internacional y los cambios climáticos extremos.

La historia del vino vasco está llena de resiliencia y tradición, remontándose a tiempos romanos, cuando las características de la región ya favorecían la producción de vinos de calidad.

A lo largo del siglo XX, el sector experimentó una recuperación tras las guerras y la crisis económica, consolidándose como uno de los pilares de la economía rural vasca.