Mesa redonda en Euskadi recuerda el atentado de la Cafetería Rolando, primer ataque masivo de ETA, analizando sus consecuencias y la historia de la violencia en el país.
Esta tarde, en el espacio cultural Gogora de Euskadi, se llevó a cabo la mesa redonda titulada ‘Reflexiones sobre la primera masacre de ETA y sus consecuencias’.
Este evento tuvo lugar para conmemorar el atentado sucedido el 13 de septiembre de 1974, cuando una bomba en la Cafetería Rolando de Madrid resultó en la muerte de 13 personas e injurió a otras 70.
Este trágico suceso es recordado como el primer ataque masivo de la organización terrorista ETA, y marcó un hito en la historia socio-política de España, generando una profunda división dentro de ETA, dando paso a la escisión entre ETA político-militar y ETA militar.
El director del Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos-Gogora, Alberto Alonso, fue el encargado de presentar la mesa redonda.
En su discurso, Alonso hizo un llamado a todos los presentes: “Este encuentro es una oportunidad para profundizar en nuestro conocimiento del pasado y promover un debate crítico que contribuya a la construcción de una sociedad que valore los principios democráticos”.
Alonso precisó que la organización de estas iniciativas será una de las prioridades de trabajo en los años venideros, enfatizando la importancia de revisar y comprender la historia para evitar la repetición de errores.
El atentado de la Cafetería Rolando fue un episodio que desencadenó profundos debates dentro de la banda terrorista sobre el uso de la violencia como medio para alcanzar objetivos políticos.
“Fue una de las tantas ocasiones en que ETA tuvo la oportunidad de poner fin a la violencia, una oportunidad que, lamentablemente, no se aprovechó”, reflexionó Alonso.
La mesa fue moderada por el periodista Gorka Landaburu, quien guiò las intervenciones de Lourdes Auzmendi y Josu Elkoro, ambos ex miembros de ETA, así como de Gaizka Fernández Soldevilla, historiador y responsable del Área de Archivo, Investigación y Documentación del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo.
Durante la discusión, los participantes examinaron cómo se vivió este atentado dentro de la organización y de qué manera influyó en la evolución posterior de ETA.
Asistieron al evento varios familiares de víctimas de ETA y de la violencia terrorista, así como representantes de diferentes asociaciones que trabajan en el ámbito de la convivencia en Euskadi.
El público también incluyó a académicos y personas interesadas en la memoria histórica. Entre los representantes institucionales, se encontraron Alfredo Retortillo, viceconsejero de Derechos Humanos, Memoria y Convivencia; Jagoba Álvarez, director de Derechos Humanos y Atención a Víctimas; e Iñigo Zubizarreta, concejal de Derechos Humanos, Convivencia, Cooperación e Interculturalidad del Ayuntamiento de Bilbao.
Este tipo de encuentros no solo rinden homenaje a las víctimas de esta barbarie, sino que también representan un esfuerzo por impulsar el diálogo y el entendimiento sobre un pasado doloroso que todavía resuena en la memoria colectiva de muchas personas en Euskadi.
