El Departamento de Educación de Euskadi continúa en negociaciones para mejorar las condiciones laborales del profesorado, buscando acuerdos que beneficien tanto a docentes como a alumnado.

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El Departamento de Educación de Euskadi ha reafirmado su compromiso de mantener abiertas las líneas de diálogo y negociación con el objetivo de mejorar el sistema educativo vasco.

En un contexto donde la seriedad y el rigor son primordiales, se celebró la mesa negociadora para la firma de un nuevo acuerdo regulador, reflejando la disposición del departamento para atender las demandas del personal docente.

Durante esta semana, las condiciones laborales de los profesores han sido discutidas y reexaminadas en diversas ocasiones, evidenciando la receptividad del departamento a escuchar las preocupaciones expresadas por los sindicatos.

En este sentido, la comunicación ha sido constante, y la viceconsejera de Administración y Servicios, Blanca Guerrero, ha reiterado la sincera intención de llegar a un entendimiento.

"Podemos alcanzar acuerdos si mantenemos el objetivo común de mejorar nuestro sistema educativo y aseguramos resultados óptimos para nuestros estudiantes", afirmó.

Las propuestas presentadas durante las negociaciones incluyen un aumento salarial para el profesorado que desempeña funciones adicionales, como tutorías, coordinación de ciclos y jefaturas de departamento.

Asimismo, se han planteado cambios estructurales que persiguen la reducción de la carga de trabajo, como la disminución de las horas lectivas a 21 horas semanales para el personal de educación infantil y primaria.

Todo esto se enmarca dentro de un plan que contempla la desburocratización de la carga administrativa que enfrentan los docentes, permitiéndoles centrarse más en su labor educativa directa.

En cuanto al personal interino, se están considerando medidas para garantizar que se les ofrezcan las mismas condiciones que a sus homólogos funcionarios.

Esto incluye la recuperación del pago del verano y un plan que asegure su continuidad laboral a partir de los 55 años. Además, se propondrá una estrategia para salvaguardar el futuro profesional de aquellos que están en el cuerpo técnico de Formación Profesional.

La salud laboral es otro de los ejes centrales de estas negociaciones. Se prevé la implementación de protocolos que permitan adecuar o cambiar puestos de trabajo por razones de salud. Asimismo, la realización de ofertas públicas de empleo tiene como objetivo reducir la tasa de temporalidad al 5%, proporcionando así una mayor estabilidad en los equipos docentes.

Este esfuerzo por mejorar las condiciones laborales y la calidad del sistema educativo no solo es crucial para los profesionales de la enseñanza, sino también para garantizar a los estudiantes un marco óptimo para su aprendizaje.

Es fundamental que los docentes se sientan valorados y respaldados en su trabajo, ya que de su bienestar depende directamente la calidad de la educación que reciben los alumnos.

Resumiendo, el Departamento de Educación de Euskadi se encuentra en una fase activa de negociación, buscando implementar cambios significativos que beneficien tanto al personal docente como a la comunidad educativa en su conjunto.

Con una disposición positiva y un enfoque colaborativo, se espera que estas conversaciones resulten en un acuerdo que fortalezca el sistema educativo vasco.