Un informe revela que Euskadi ha alcanzado una mejora significativa en la calidad del aire y una notable reducción de emisiones de CO2 en 2023, aunque existen desafíos que requieren atención.
El reciente informe titulado 'Coyuntura Ambiental Euskadi 2024', presentado por Josu Bilbao, viceconsejero de Medio Ambiente del Gobierno Vasco, ha puesto de manifiesto importantes avances en la calidad del aire en esta comunidad autónoma.
De acuerdo con los datos revelados, aproximadamente el 91% de los días del año 2023 ha tenido una calidad del aire calificada como 'buena' o 'muy buena'.
Este resultado es un indicativo alentador de los esfuerzos realizados para reducir la contaminación atmosférica.
Euskadi logró emitir 17 millones de toneladas de CO2 en 2023, lo que representa una disminución del 33% en comparación con el año base 2005. Este hito es un paso significativo hacia el cumplimiento de los objetivos establecidos por la Ley de Transición Energética y Cambio Climático, que establece la meta de alcanzar cero emisiones netas para el año 2050.
Además, el informe destaca que el estado de salud de las masas de agua se mantiene estable, con aproximadamente el 50% de las aguas superficiales y el 90% de las aguas subterráneas en buen estado.
Desde el año 2000, la recuperación de suelos contaminados ha sido una prioridad, habiendo recuperado hasta ahora 1.465 hectáreas de un total de 1.584 lugares contaminados. Sin embargo, a pesar de los logros, se señala que la salud de los suelos requiere atención continua y sostenida. Un aspecto preocupante que surge del informe es el declive en la población de aves asociadas a medios agrarios, que ha disminuido un 37% desde 1998. En contraste, las aves de las áreas forestales y urbanas han incrementado sus poblaciones en un 103% y 19%, respectivamente.
En cuanto a la gestión de residuos, Euskadi ha reducido la generación de residuos urbanos en un 4% desde 2003, alcanzando 1.106.000 toneladas en 2022. El 80% de estos residuos son de origen doméstico. Además, la cantidad de residuos que terminan en vertederos ha disminuido un 54% desde 2018, acercándose al objetivo de reducir esta cifra por debajo del 15% para el año 2030.
El informe también revela un notable desacoplamiento entre el PIB de Euskadi y las emisiones de gases de efecto invernadero, lo que indica un crecimiento económico sostenible.
Sin embargo, la fiscalidad ambiental en la región, que solo representa el 1,5% del PIB, se encuentra por debajo de la media de la Unión Europea del 2%.
Este aspecto sugiere que hay margen para fomentar políticas que prioricen la sostenibilidad económica en alineación con los objetivos ambientales.
La percepción de la ciudadanía con respecto al medio ambiente en Euskadi es positiva; casi la totalidad de la población considera que el medio ambiente juega un papel crucial en la calidad de vida.
Asimismo, el 76% de los ciudadanos muestra preocupación por el cambio climático y respaldan medidas para combatirlo.
El informe 'Coyuntura Ambiental Euskadi 2024' no solo resalta los progresos realizados en la calidad del aire y la reducción de emisiones, sino que también reitera la importancia de abordar desafíos persistentes en la gestión del agua, la recuperación de suelos, y la gestión eficiente de residuos.
Sin lugar a dudas, la implicación activa de la ciudadanía y la implementación de políticas efectivas son elementos clave para que Euskadi continúe en su camino hacia convertirse en un referente europeo en sostenibilidad.
