Una pareja de creadores de contenido realizó una ambiciosa renovación de una vivienda en ruinas, invirtiendo cerca de 27,000 euros y logrando convertirla en un hogar con estilo y carácter. Descubre cómo aprovechar recursos y la pasión por el bricolaje para darle una segunda vida a una propiedad olvidada.
Una vivienda abandonada que parecía destinada a la demolición ha renacido gracias a la dedicación y creatividad de una pareja de creadores de contenido.
Jenna Phipps, conocida por su contenido en redes sociales sobre bricolaje y manualidades, junto a su pareja Nick, vieron en esa casa una oportunidad única para llevar a cabo un proyecto de transformación completo.
La propiedad, ubicada en un entorno pintoresco con vistas al agua, había estado desocupada durante años. La pareja se enamoró de sus detalles arquitectónicos de mediados del siglo XX, como grandes ventanales y un diseño minimalista, además de contar con una piscina que, aunque en mal estado, prometía un potencial increíble.
Al comenzar el proceso en principios de 2024, descubrieron que la casa había sido un hogar lleno de recuerdos, con muebles antiguos, libros del siglo XIX, un piano funcional y ropa de épocas pasadas, que encontraron en su interior.
Sin embargo, el paso del tiempo y las inclemencias del clima habían dañado severamente la estructura: los pisos estaban afectados por agua, partes del techo se habían desplomado y la presencia de insectos era evidente.
Además, una fuga de agua en una tubería provocó un daño adicional, agravando la situación.
A pesar de los obstáculos, Jenna y Nick decidieron asumir el reto con entusiasmo. Jenna, que ya era una influencer en el mundo del bricolaje y las manualidades, comenzó a documentar cada paso en sus redes sociales, compartiendo tanto los avances como los contratiempos de la remodelación.
La inversión total en materiales y mano de obra, incluyendo la compra de herramientas eléctricas y materiales de construcción, fue de aproximadamente 27,000 euros.
Este presupuesto les permitió renovar completamente la estructura, reemplazar los pisos dañados, reforzar el techo, reparar las instalaciones eléctricas y sanitarias, y transformar la piscina en un espacio moderno para relajarse.
El trabajo no solo implicó esfuerzo físico, sino también decisiones creativas. La pareja optó por mantener algunos elementos originales, como las ventanas de estilo mid-century, y combinarlos con un diseño contemporáneo en interiores.
La cocina, por ejemplo, fue diseñada a medida, con baldosas y mobiliario que ellos mismos instalaron, creando un espacio que refleja su personalidad.
Este proyecto es un ejemplo de cómo una actitud perseverante y la pasión por el bricolaje pueden convertir una propiedad en ruinas en un hogar acogedor y estilizado.
Jenna afirma que la experiencia le enseñó el valor del esfuerzo y la paciencia, y que ahora aprecia mucho más el proceso de construcción y renovación.
Además, este tipo de proyectos no solo aportan satisfacción personal, sino que también pueden ser una inversión inteligente. La tendencia en el mercado inmobiliario muestra que las casas bien renovadas en zonas con vistas al agua y estilo vintage moderno pueden aumentar significativamente su valor.
En términos económicos, las 27,000 euros invertidos en esta renovación podrían traducirse en un valor de mercado mucho mayor en el futuro.
Para quienes sueñan con renovar su propia vivienda, Jenna recomienda comenzar con un plan claro y no temer a los desafíos. “Solo hay que empezar”, dice, “cada paso cuenta y al final, la satisfacción de haber creado tu propio hogar es inigualable”.
Este proyecto demuestra que con dedicación, creatividad y un presupuesto razonable, transformar una casa en estado de abandono en un hogar lleno de vida y estilo es completamente posible, incluso en tiempos donde la economía requiere decisiones inteligentes y bien planificadas.
