Las grandes corporaciones en Estados Unidos continúan con la conmemoración del Juneteenth, pero en un contexto marcado por la polarización política y la resistencia a las iniciativas de diversidad e inclusión impulsadas en los últimos años. Desde su reconocimiento oficial en 2021, la forma en que las empresas celebran esta fecha ha cambiado notablemente, influenciada por los ataques políticos y sociales a los programas de DEI (Diversidad, Equidad e Inclusión). Este artículo analiza cómo las corporaciones adaptan su participación en el Juneteenth, las cifras actuales de participación y el impacto de la polarización en esta conmemoración.

Desde su reconocimiento como día festivo federal en 2021, muchas #empresas comenzaron a adoptar esta celebración como parte de su compromiso con la #diversidad y la inclusión.
Sin embargo, en los últimos años, la forma en que las corporaciones honran esta fecha ha sufrido cambios significativos, principalmente debido a la creciente polarización #política y a los ataques dirigidos contra las iniciativas de DEI (Diversidad, Equidad e Inclusión) impulsadas por el gobierno y sectores conservadores.
En 2020, en plena ola de protestas por justicia racial tras la muerte de George Floyd, muchas grandes empresas se sumaron rápidamente a la conmemoración del Juneteenth.
Se organizaron eventos, se emitieron comunicados públicos y se otorgaron días libres a los empleados como muestra de apoyo a la causa. La celebración en aquel entonces fue masiva y estuvo marcada por un fuerte compromiso público, con la esperanza de promover un cambio real en la cultura corporativa.
No obstante, en los años posteriores, especialmente con la llegada de la administración Trump y la intensificación de la retórica en contra de las políticas de diversidad e inclusión, muchas compañías comenzaron a reducir la visibilidad de sus actividades relacionadas con el Juneteenth.
Según un estudio reciente de la consultora Mercer, en 2024, solo el 40% de los grandes empleadores en Estados Unidos ofrecieron el día como festivo pagado, frente al 39% del año anterior y mucho menos del 60% en 2022.
Además, muchas empresas optaron por actividades internas discretas en lugar de eventos públicos o campañas de sensibilización.
Por ejemplo, gigantes tecnológicos como Meta han mantenido el día como feriado pagado en sus oficinas en Estados Unidos, otorgando el día libre a sus empleados.
En contraste, empresas minoristas como Walmart no otorgan día libre, pero sí promueven actividades culturales en sus tiendas para que los empleados puedan celebrar en sus puestos de trabajo.
Otras compañías, como Bank of America, decidieron cerrar sus sedes en ese día, mostrando un compromiso más visible con la celebración.
El cambio en la forma de conmemorar el #Juneteenth también refleja un fenómeno histórico
El cambio en la forma de conmemorar el Juneteenth también refleja un fenómeno histórico. Desde su instauración en 1865, esta fecha ha sido un símbolo de la lucha por la libertad y los derechos civiles. Sin embargo, en la última década, ha sido objeto de debates políticos, con algunos líderes y sectores que intentan minimizar su importancia o deslegitimar la agenda de derechos civiles asociada.
Este contexto ha llevado a que muchas empresas opten por actividades de menor perfil público, centradas en la internalización del mensaje y en acciones que refuercen el sentido de pertenencia entre empleados afroamericanos y otros grupos.
La tendencia parece ser que, a medida que el clima político se vuelve más adverso, las corporaciones prefieren mantener celebraciones más discretas, evitando confrontaciones públicas.
A pesar de ello, organizaciones como Hella Creative, que promovieron campañas para que más empresas reconocieran el Juneteenth, señalan que la aceptación bipartidista del día en la sociedad estadounidense ha contribuido a que su reconocimiento perdure.
La celebración sigue siendo una oportunidad para que las compañías envíen mensajes de #inclusión y compromiso con la justicia racial, aunque de forma más reservada.
En definitiva, la celebración del Juneteenth en el ámbito corporativo en Estados Unidos ha pasado de ser una manifestación pública y visible a una conmemoración más contenida y estratégica.
La influencia de los ataques políticos, especialmente los liderados por la administración Trump y sus seguidores, ha generado un cambio en la percepción y en la forma en que las empresas abordan esta fecha, reflejando las tensiones sociales que aún persisten en el país.