El Consejo de Ministros, en su última reunión, ha tomado la decisión de modificar los límites de gasto establecidos en la Ley General Presupuestaria, permitiendo al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico activar una serie de inversiones cruciales para mejorar la estrategia de lucha contra incendios forestales.

Esta medida busca responder a la creciente preocupación por los desastres naturales, que han tenido un aumento significativo en los últimos años debido al cambio climático.

La Autoridad que solicitó este ajuste fue la Dirección General de Biodiversidad, Bosques y Desertificación, que ha identificado diversas áreas de acción que son prioritarias.

Entre estas, destacan la conservación del medio natural, el fortalecimiento del conocimiento del patrimonio natural y la gestión forestal.

Uno de los aspectos más relevantes de esta modificación se centra en las inversiones dirigidas a combatir los incendios forestales.

El Gobierno planea destinar, entre 2025 y 2026, un total de aproximadamente 134 millones de euros (134.218.390,92 €) en compromisos adquiridos para estas acciones, que incluyen, además de la compra de medios aéreos para la extinción, la implementación de un sistema más efectivo de prevención y atención a emergencias.

La situación es más urgente si consideramos que las estadísticas sobre incendios forestales han ido en aumento: en 2022, España experimentó uno de los veranos más secos en décadas, lo que provocó un aumento abrupto en la frecuencia y magnitud de estos eventos.

Durante el 2023, el país sufrió incendios que devastaron miles de hectáreas, causando daños irreparables a la flora y fauna, así como a las comunidades locales involucradas.

El Gobierno ha urgido que estas acciones no se limiten solo a la extinción de incendios, sino que también incluyan medidas preventivas y de gestión de bosques que protejan estos ecosistemas.

La ley ahora revisada también contempla la posibilidad de realizar inversiones que no pueden esperar, ya que están ligadas a requisitos legales o necesidades operativas inminentes.

Se estima que las inversiones en conservación y gestión forestal podrían ascender a hasta 129 millones de euros (129.000.000 €) en los próximos años, distribuidos en múltiples áreas para asegurar que el país esté mejor preparado ante los incendios y otros desastres naturales.

Esta inversión se considera indispensable no solo para proteger el entorno, sino también para salvaguardar la economía de muchas regiones que dependen del turismo y las actividades agrícolas.

En conclusión, este acuerdo del Consejo de Ministros representa un paso significativo hacia la mejora de la resiliencia de España ante el creciente desafío de los incendios forestales.

La decisión refleja un compromiso en la gestión sostenible de los recursos naturales del país y en la importancia crucial de la prevención para asegurar un futuro ecológicamente viable.