El Consejo de Ministros, durante su reunión del 11 de noviembre de 2024, ha puesto en marcha nuevas medidas de apoyo fiscal dirigidas a los autónomos y empresas que se han visto afectados por la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA). Esta serie de iniciativas supone una reducción del 25% en la tributación por módulos para más de 22,600 contribuyentes, lo que representa un ahorro medio de aproximadamente 400 euros para cada uno de ellos.

Además, se establece una reducción similar del 25% en las cuotas del régimen simplificado de IVA, beneficiando a otros 4,900 autónomos y permitiéndoles un ahorro aproximado de 92 euros cada uno.

El Gobierno permite que los autónomos y empresarios opten excepcionalmente por renunciar a la tributación por módulos en 2024, con la posibilidad de regresar a este régimen tributario en 2025 y 2026 si así lo deciden.

Esta disposición es similar a la que se implementó durante la crisis provocada por la pandemia de COVID-19, mostrando el compromiso gubernamental de adaptar las normativas fiscales a circunstancias extraordinarias.

En cuanto a las ayudas directas, se amplía la cobertura a los autónomos y empresas que hayan sufrido daños, incluso si no poseen su domicilio fiscal en los municipios más afectados.

Esta medida se estima que beneficiará a unos 5,800 adicionales, aumentando la cifra total de beneficiarios de estas ayudas a más de 100,000. Los autónomos podrán recibir hasta 5,000 euros en asistencia, y las empresas podrán acceder a entre 10,000 y 150,000 euros, dependiendo de su facturación.

Las solicitudes para estas ayudas se podrán hacer a través de la plataforma de la Agencia Tributaria desde el 19 de noviembre hasta el 31 de diciembre de 2024. Para facilitar su gestión, solo será necesario indicar el número de cuenta bancaria donde se realizarán los ingresos.

Se prevé que la Agencia comience a efectuar los pagos a partir del 1 de diciembre de este año.

Es importante señalar que estas ayudas estarán exentas de tributación en el IRPF y en el Impuesto sobre Sociedades, lo que las convierte en un alivio significativo para los beneficiarios.

Otra de las medidas aprobadas por el Gobierno es la exención del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) de carácter rústico para el ejercicio 2024, beneficiando a agricultores y ganaderos que hayan enfrentado pérdidas en su producción.

Aquellos contribuyentes que ya hayan realizado el pago correspondiente podrán solicitar la devolución de las cantidades ingresadas.

Además, el Real Decreto-ley incluye flexibilidad en los plazos y procedimientos tributarios a nivel autonómico y local, de manera similar a lo que se ha establecido para la Agencia Tributaria.

La magnitud de estas medidas refleja el interés del Gobierno por brindar un apoyo integral a los afectados por la DANA, que ha tenido un impacto significativo en diversas regiones del país desde finales de octubre hasta principios de noviembre de 2024.

Con un impacto presupuestario previsto de alrededor de 3,765 millones de euros, estas medidas se añaden a los 10,600 millones de euros ya movilizados en la semana anterior, mostrando un esfuerzo constante por mitigar los efectos de este desastre natural y por facilitar la recuperación económica de los damnificados.